El discurso del periodista dio el punto de partida a las fiestas de Vilagarcía
15 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.No es mal recorrido volver de la emigración estadounidense para acabar en el balcón de tu ciudad adoptiva dando el pregón de las fiestas. Y ese ha sido el recorrido de Alberto Avendaño, vilagarciano de adopción, que ayer tuvo el honor de dar el pistoletazo de salida de las fiestas de San Roque. Lo hizo acompañado en el balcón por su compañera Zuni que fue, según dijo, la que decidió que tocaba abandonar el «poder de Washington polo querer de Arousa». Y estuvo acompañado Avendaño también, sino en presencia sí en espíritu, por un San Roque que lo invade todo desde hoy. Un San Roque que se ha subido a la modernidad para mandar mensajes por WahtsApp al pregonero, dejando constancia de lo que realmente le interesa y que, según los aplausos, es lo que le interesa también a la plebe, que es más fácil de contentar probablemente de lo que muchos piensan: «Se mascades chicle non o botedes ao chan: traghádeo», fue el primer WhatsApp, que, por cierto, despertó el recelo de uno de esos chavales que parecen que parece que no escuchan pero que están atentos a todo. «Pero, ¿cómo que hay que tragarse los chicles?», le preguntó a su madre. El segundo mensaje llegado desde las altas instancias también era claro: «Se fumades traghade as cabichas dos cigarros. E se non as dades traghado, apaghádeas e botádeas no lixo». Con el tercero, San Roque tuvo una consideración y eludió ordenar a los vilagarcianos que se tragaran «a merda dos cans». Con echarla a la papelera le basta. Y el último fue dirigido a todos aquellos que pintan la mona pintando las paredes.
Avendaño también tuvo palabras para los llegados de fuera de Galicia. «Gracias por respetar nuestra lengua y nuestra cultura. Eso hará que los chinchos y las almejas que comáis sepan mejor», dijo tirando de una retranca que se hizo notar durante todo el pregón, que acabó con un sentido agradecimiento: «Eu, encantado de vivir aquí e agora ser de aquí. Porque como dixo o poeta: sempre acabamos chegando a onde nos esperan. E como digo eu: espérannos aquí, onde estamos destinados a estar».
Y, tras la interpretación del himno gallego por la banda, arrancó el desfile de la ofrenda floral. Y, con él, las fiestas.
San Roquiño o Pequeno en la previa de la Festa da Auga
El día de hoy estará marcado por la festividad de San Roquiño O Pequeno, que se llevará a cabo en el barrio que lleva el nombre del santo. Las actividades comenzarán con un pasacalles a cargo del grupo de gaitas Os Terribles de Arousa, seguido de la misa en honor a San Roquiño, acompañada por la coral Cortegada. A continuación, se celebrará una procesión que recorrerá las calles del barrio, culminando con el reparto de vino y empanada para todos los asistentes, cortesía del Concello.
La agenda de la jornada también incluye diversas actuaciones musicales, comenzando a las 21.00 con el grupo local Cruceros Manzanares en la plaza de Galicia. Esta banda, liderada por la vilagarciana Enma Castañeiras, promete hacer bailar al público con su mezcla de sonidos de los años setenta y ochenta. Más tarde, a las 22.30 horas, será el turno de The Eskarallas, una banda nacida en Vilaxoán que traerá su enérgico rock a la plaza.
La noche culminará con la actuación de los Festicultores Troupe, un grupo que, con su singular estilo y su peculiar motocultor tuning Barreiros, recorrerá las calles de la ciudad repartiendo humor y buena música.