O Salnés, una comarca «petfriendly» donde el perro va en kayak, al restaurante y chapotea en el hotel
AROUSA
«Antes venían familias con niños, ahora vienes parejas con mascota», señalan los empresarios del sector turístico
28 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.En la comarca de O Salnés es fácil encontrar a un perro en un restaurante, hospedado en un hotel o a bordo de un kayak por la ría, pero no siempre fue así. Hasta no hace mucho, viajar con el perro estaba reservado a las élites que podían contratar servicios extra a golpe de talonario, pero en un país con 7,5 millones de mascotas como hay en España la realidad está cambiando y lo hará todavía más.
Atendiendo a este fenómeno, la Mancomunidade do Salnés se ha propuesto convertirse en un «referente» del turismo petfriendly (el que se hace con mascotas) y en esta apuesta se inscribe la web osalnespetfriendly.com que lleva un mes operativa y ayer fue presentada en un acto en Cambados en presencia del presidente, David Castro, el delegado de Turismo, Jose Aspérez, y el gerente, Ramón Guinarte.
En esta guía virtual participan un centenar de negocios entre los que caben desde establecimientos de hostelería o bodegas hasta taxis, peluquerías caninas y empresas de ocio náutico. Se trata de ofrecer una amplia gama de servicios y una herramienta de fácil uso para localizarlos con el objetivo de que el viaje con el perro o el gato no solo no suponga un problema sino que sea un aliciente para disfrutar de la experiencia. No todo el mundo va a querer tirarse en paracaídas con su amigo de cuatro patas, que hay quien lo hace, pero cada vez son más quienes quieren llevárselo de ruta en bicicleta o en kayak. De ello dan fe en Piragüilla, donde tienen experiencia e infraestructura para dar respuesta a las necesidades que plantean las mascotas; disponen de carritos y cestos adaptados a sus bicicletas y, aunque no es obligatorio ponérselo, facilitan chalecos salvavidas para los perros cuando sus dueños no los traen consigo.
Los clientes agradecen esta equipamiento, pero no menos útiles les resultan consejos que les ofrecen relativos, por ejemplo, a la prohibición desembarcar con los perros en los espacios naturales o de la conveniencia de dejarlos en la base en vez de en la playa cuando estos deben esperar en tierra. «Da gusto darles este servicio», comentaba Marta Iglesias ayer durante el acto de presentación.
Junto a ella estaba Bea Castro, propietaria del hotel y los apartamentos Cons da Garda (O Grove) que puede presumir de ser otra de las pioneras en trabajar el turismo de mascotas, con premios incluidos. Desde que en 2010 se lanzara a esta aventura, hoy el 90 % de sus clientes llegan con animales: «Antes venían familias con niños, ahora vienen parejas con mascota», explica la empresaria. Algún gato duerme también en el hotel y han llegado a hospedar a un cerdo vietnamita, conejos, tortugas, loros y a una iguana.
Salvo alguna escapada fuera de control y algún cojín mordisqueado, este tipo de huéspedes no suelen dar problemas, afirma Bea Castro, y para que ellos y sus dueños estén lo más confortables posible disponen de jardín, espacios para compartir la comida, guardería, peluquería, actividades como Reiki y, a partir de este verano, también piscina. Ya que la normativa sanitaria impide compartir bañera a animales y personas, el hotel contará con «chapoteadero canino» para que nadie se quede sin su baño refrescante cuando el calor apriete.
Comer de plato y mantel junto al perro tampoco debería ser un problema en O Salnés porque existen al menos nueve restaurantes —a los que hay que sumar chiringuitos y cafeterías— en los que se les recibe con las puertas abiertas y dispensan servicios como bebederos y comida, caso del restaurante Mezclum de Vilagarcía.
Más gasto y más noches de hotel
La mancomunidad tiró ayer de cifras para justificar la importancia del turismo petfriendly. Desde el último verano prepandemia a la actualidad se han disparado en Google las búsquedas relacionadas con alojamientos que admiten mascotas, incrementándose en más de un 90 % con respecto al mismo período del año 2019; la duración media de las estancias con perro es de cinco noches, por encima de la duración media de los viajes de turistas españoles, que según el INE se sitúa en 4,06 noches; el gasto medio por noche que asumen los viajeros con perro es de 72,6 euros, un 23 % superior al gasto medio del viajero convencional; en cuanto al gasto medio total por persona y por viaje, según el INE es de 238 euros, mientras que el de los viajeros con perro es de 361 euros.