Nueve años de cárcel para un grupo que colocaba cocaína en el Baixo Ulla previo encargo al móvil
AROUSA
Uno de sus integrantes fue sorprendido en un bar de Valga de madrugada, con cinco gramos de cocaína y 375 euros en el bolsillo
01 may 2023 . Actualizado a las 20:32 h.Parte del éxito del negocio del narcotráfico reside en ofrecer a quien desea engrosar sus filas un amplísimo abanico de implicación y ganancias. Desde quien se especializa en el manejo de embarcaciones y el alijado del material, hasta quien lo mueve por kilogramos en tierra, y quienes lo hacen llegar a su consumidor final, cortado con todo tipo de adulterantes y desmenuzado en pequeñas dosis. Las cuatro personas que acaban de ser condenadas a un total de nueve años de cárcel por la Audiencia Provincial de Pontevedra pertenecen a este último eslabón de la cadena: el del trapicheo. Se movían en los municipios del Baixo Ulla, fundamentalmente en Valga y en Pontecesures, y contactaban con su clientela a través de un teléfono móvil que recibía los encargos y tres de los integrantes del grupo se iban pasando entre ellos.
El más veterano de los cuatro es un individuo de cuarenta años, nacido en Dodro. Él era quien suministraba la cocaína al resto de la pandilla. Los otros tres, dos hombres y una mujer cuyas edades oscilan entre los 33 y los 25 años, recibían sus instrucciones y se turnaban el móvil a través del que los clientes realizaban sus encargos. El 2 de febrero del 2019, un operativo de la Guardia Civil contra el trapicheo sorprendió en un bar de Valga a uno de los miembros de la banda con 375 euros y cinco gramos de cocaína encima. Tenían una pureza del 31 % y estaban distribuidos en catorce dosis. Este fue el hilo del que tiraron los agentes.
Tres de los condenados lo han sido por pertenencia a grupo criminal y tráfico de drogas, mientras que el cuarto lo fue solo por este segundo cargo. Los tres hombres eran, a su vez, consumidores.