El temporal destrozó el falso techo de la escuela infantil municipal

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Efraín dejó un reguero de incidencias en Vilagarcía, pero sin daños personales

13 dic 2022 . Actualizado a las 14:15 h.

En apenas una hora, entre las 7.20 y las 8.20 de la mañana, la estación de Corón registró un total de 34 litros por metro cuadrado de lluvia. De madrugada había comenzado a llover, pero fue en ese momento cuando lo hizo de una manera especialmente intensa. De hecho, entre las 7.30 y las 7.40 cayeron 10,3 litros por metro cuadrado. Es decir, más en solo esos diez minutos que en todo el mes de agosto. Esa enorme cantidad de agua, la marea llena y el otoño y sus hojas caídas atorando las alcantarillas se alinearon para crear un pequeño caos matutino, con Vilagarcía como zona cero de las incidencias.

Efraín, que así se llama el temporal, dejó un reguero de problemas y algún susto. El más grave, la caída de parte del falso techo de la escuela infantil municipal sita en Matosinhos. Las imágenes no dejan lugar a dudas, con una cascada de agua cayendo sobre las aulas que, afortunadamente, estaban prácticamente vacías, porque, aseguran desde el Concello que pocas familias habían llevado a los pequeños a las aulas dado el inmenso chaparrón que estaba cayendo. Desde Ravella se apunta a la acumulación de agua en los canelones de pluviales como causa del problema.

«Pudo suceder una desgracia»

Desde la escuela municipal infantil recuerdan que es la segunda vez que este año sufren una inundación, aunque la anterior no fue tan grave como esta. «A las ocho, de repente, se cayó el techo», recuerdan. Los niños que habían llegado al centro no estaban en la zona afectada, afortunadamente. «Esa aula no la usamos hasta las diez. Pudo ser una desgracia si llega a caer el chaparrón a esa hora», apuntan. Enseguida avisaron a las familias para que, quienes pudieran, evitaran llevar a los pequeños a una escuela infantil que hoy, en principio, ya podrá abrir sin problemas. La causa del desaguisado la sitúan en que las zonas que debería achicar agua del tejado se obstruyen fácilmente con las hojas de los plátanos que rodean el edificio. Y aseguran que se limpió el 1 de diciembre.

El agua también hizo de las suyas en el recinto de Fexdega. De hecho, las pistas deportivas tardarán unos días en poder volver a utilizarse, ya que mientras no estén completamente secas sería un auténtico peligro. Por la tarde, sin embargo, la zona en la que están instaladas las instalaciones del Fexturrón se abrió con total normalidad, aseguran fuentes municipales.

A Fexdega llegó el agua porque se inundó la avenida Rodrigo de Mendoza, y, de hecho, los problemas en las calles vilagarcianas fueron constantes durante las primeras horas de la mañana, con las avenidas Rosalía de Castro y Doutor Tourón como zonas más afectadas. No fueron las únicas. En Rey Daviña, por ejemplo, el agua corría a sus anchas como hacía tiempo que no se veía. El parte de incidencias señala problemas similares en otras zonas peatonales como la plaza de Galicia o Matosinhos, y también en calles con tráfico rodado como la avenida de As Carolinas, Ramón Martínez, el entorno del colegio de A Escardia, Guillán, el puente de la rúa San Xosé, la rúa Quintáns (Rubiáns) y la rúa Coca. Además, los servicios municipales acudieron a achicar agua a un bajo de Rafael Pazos, a otro en Castroagudín y a un patio de Fariña Ferreño. «Persoal do servizo Municipal de Emerxencias e Protección Civil, da Policía Local e dos departamentos de Obras, Xardíns, Medio Ambiente. Electricidade e Deportes, traballaron no dispositivo especial», afirma el Concello.

El alcalde visitó las calles comerciales que sufrieron los efectos de las inundaciones

Acompañado de la teniente de alcalde Tania García, y del concejal de Seguridade Cidadá, José María González, Alberto Varela, alcalde de Vilagarcía, recorrió en la mañana de ayer las principales calles comerciales del centro de la ciudad. El regidor subrayó la excepcionalidad de la situación, con una gran cantidad de lluvia que «unidas á orografía plana e ás particularidades de Vilagarcía ?—situada a nivel do mar e con moitas zonas de recheos gañados a este— foi a causa de que as redes de recollida de pluviais se viran colapsadas e a auga buscase saída cara a superficie, anegando as rúas», se explica desde el Concello. Varela Paz destacó la coordinación de los efectivos disponibles para que a media mañana más del 90 por ciento de los espacios públicos volvieran a la normalidad.

Críticas de PP y Podemos

Para los grupos de la oposición, sin embargo, lo sucedido tiene un culpable, y no es otro que el gobierno local. «En la zona de Doutor Tourón realizaron en sus dos últimos mandatos por lo menos tres obras diferentes, sin atajar en ninguna de ellas el problema de las inundaciones. Cada vez que llueve en Vilagarcía salen a la luz las deficiencias de una nefasta planificación urbanística. Los grandes problemas creados por las lluvias siguen a la espera de solución desde que Alberto Varela llegó a la alcaldía, pese a la gran cantidad de millones gastados en obras», apunta Ana Granja.

En la misma línea, desde Podemos Marea da Vila se denuncia que el «caos» vivido es consecuencia de un gobierno local «máis preocupado polo postureo que por dar solucións».