El ministerio saca a concurso la redacción del proyecto, por valor de 773.000 euros
29 oct 2022 . Actualizado a las 20:59 h.Vilagarcía podría ver cumplido en los próximos años uno de sus mayores deseos: contar con una conexión real y directa con la autopista AP-9. La misma se realizaría a través de la circunvalación sur de la ciudad, más conocida como el acceso al puerto y, según asegura el alcalde, Alberto Varela, el proyecto ya ha dado sus primeros pasos. Porque el Ministerio de Transportes acaba de sacar a licitación la redacción de este documento, por valor de 773.000 euros. La previsión es que esta obra, que beneficiará también al municipio de Caldas con una nueva variante por el oeste, cueste 54 millones de euros. Y aunque el Concello es consciente de que se está hablando de un proyecto a muy largo plazo, Varela no ha dudado en calificar de buena noticia la puesta en marcha del mismo.
El regidor vilagarciano celebra que el Gobierno central haya decidido, por fin, actuar sobre la variante de Caldas de Reis. Porque eso implica, también, la mejora de los accesos al puerto de su ciudad, que está considerado como de interés general del Estado. Argumenta que la puesta en marcha de esta iniciativa supondrá que Vilagarcía podrá contar con un acceso directo a la autopista y una mejora notable en las entradas y salidas desde el sur y el este. Por eso está encantando de que el ministerio haya licitado esta misma semana el estudio informativo de este nuevo vial. Un trámite que supondrá una inversión de 773.000. «É, sen dúbida, unha boa noticia tanto para os cidadáns como para os empresarios, pois non so se mellorará o tráfico e a mobilidade, senón que se incrementará a competitividade do porto, motor económico de primeiro orde no municipio», aseguran en el Concello.
Desde Ravella explican que el ministerio considera necesario actuar para mejorar las comunicaciones en Caldas de Reis. Porque la puesta en servicio de la conocida como variante este de la N-550, en el 2009, y la carretera de nuevo acceso al puerto vilagarciano, un año después, configuraron un escenario que evitaba el paso del tráfico de largo recorrido a través de Caldas en los itinerarios entre el este y el sur y el norte y el acceso a la rada vilagarciana. Pero, admite el gobierno central, este vial «non evita que os tráficos en dirección este-oeste da N-640 atravesen o centro urbano de Caldas de Reis en travesía».
Este es el principal motivo por el que Transportes considera necesario abordar un estudio informativo que busque alternativas de trazado a una variante oeste de Caldas, que permita evitar el paso por la travesía de los tráficos que provienen de la carretera N-640. Y es que, entre otras cosas, este recorrido incluye dos giros de noventa grados en calles principales del municipio. El alcance de esta variante, explicaron en el ministerio a Ravella, llegará desde la N-500 por el este, hasta el entorno de la conexión con la AP-9, cerca del punto kilométrico 230 de la N-640, por el oeste. Pero es que, además, insisten en el Concello, el estudio informativo que ahora se ha licitado incluye la concepción de una nueva vía con control de acceso entre el final de la nueva variante oeste y el kilómetro 233 de la N-640, que da inicio a la travesía de Vilagarcía y al acceso al puerto. «O estudo contemplarán, por fin, unha mellora global das comunicacións da zona», argumenta el gobierno vilagarciano.
El alcalde es consciente de que será preciso mucho tiempo para desarrollar el estudio informativo, primero, y acometer más tarde las obras previstas en el mismo. Pero, aún así, valora muy positivamente lo que considera una apuesta del Gobierno central por la ciudad y su entorno, pues considera que ambos verán sensiblemente mejoradas sus comunicaciones con el resto de Galicia.
Dos años para elaborar el estudio de una obra que podría costar 54 millones de euros
El presupuesto que el Ministerio de Transportes tiene pensado invertir en la construcción de estos nuevos viales da una idea de la magnitud que tendrá el proyecto, pensado para mejorar las conexiones de Caldas, pero también las de Vilagarcía, al prever conectar de forma directa la ciudad con la autopista AP-9. Porque las previsiones hablan de que las obras podrían superar los 54 millones de euros. Además, la empresa que finalmente resulte adjudicataria de la realización de este estudio dispondrá de un plazo de dos años para tenerlo listo. Su misión será la de elaborar diversas propuestas para que, posteriormente, los principales afectados, los municipios de Caldas y Vilagarcía, puedan estudiar cuál es la mejor solución.
Todos los interesados en acometer la realización de estos estudios técnicos deben hacer llegar sus propuestas al ministerio antes del próximo 25 de noviembre. Tres días más tarde se abrirán las plicas administrativas, mientras que el 2 de diciembre le tocará el turno a las técnicas y el 12 de enero a la parte económica. Una vez conocido el nombre del ganador del concurso, este tendrá dos años como máximo para entregar los trabajos.
Será entonces cuando los municipios de Vilagarcía y Caldas deban ponerse de acuerdo sobre cuál, de las soluciones aportadas por los redactores de los estudios, ofrece una mejor solución a los problemas de tráfico que presenta la zona. Y es que desde el ministerio entienden que todo este proyecto debe realizarse de forma conjunta y de una sola vez, tanto la mejora de las comunicaciones de Caldas, como la conexión del puerto de Vilagarcía con la autopista.