La nueva grúa del Puerto triplica la capacidad de carga de las ya existentes en Vilagarcía
AROUSA
La LHM 420 de Carrasco levanta 124 toneladas y puede mover 38 contenedores en una hora
25 feb 2022 . Actualizado a las 20:50 h.La Autoridad Portuaria de Vilagarcía de Arousa parece haber alcanzado, por fin, el nivel de crecimiento que tal vez hubiese firmado hace ya unos cuantos años si la crisis del hormigón no se hubiese interpuesto en el camino de todos. En buena lógica, el incremento de los tráficos debe llevar aparejado un refuerzo de los medios y la tecnología con los que se transfieren las mercancías que tocan sus muelles si lo que interesa es consolidarlas. Es en este capítulo en el que destaca la adquisición más reciente de P & J Carrasco, la compañía de estibadores, consignatarios y agentes de aduanas que opera en la capital arousana desde 1894. Se trata de una grúa modelo LHM 420 que, fabricada por la firma alemana Liebherr, llegó a la ría el domingo. Hay varias razones que justifican una inversión de estas características, pero una basta para comprender su utilidad. La pieza, de carácter móvil, triplica la capacidad de carga de sus precedentes. Mientras estas pueden levantar un máximo de cuarenta toneladas (son modelos LHM 150), aquella se va a las 124.
La conclusión no puede ser más sencilla: un nivel tres veces superior significa que la grúa puede hacer el trabajo en un tiempo tres veces inferior. Un ejemplo. Un mercante que ahora mismo cargue quince mil toneladas de cuarzo con destino a Canadá tardará tres días en hacerlo. Con el nuevo aparato lo hará en una sola jornada. Algo particularmente importante en un ámbito en el que el gasto en tasas portuarias de los buques, por una parte, y la oportunidad de incrementar la rotación en los muelles —y, por tanto, también el negocio—, por otra, marcan la diferencia.
Con la LHM 420, Vilagarcía se sitúa, además, a la par del resto de los puertos gallegos de interés general, e incluso por encima de una de sus plazas principales, ya que, si bien A Coruña, Marín y Ferrol disponen de equipos con capacidades de carga en torno a las 150 toneladas, Vigo se queda en ochenta.
120 metros por minuto
Más allá de este nivel máximo de carga, la nueva grúa de Carrasco puede levantar y hacer descender mercancía a una velocidad de 120 metros por minuto, y su rendimiento por lo que respecta al movimiento de contenedores apunta a 38 unidades en una hora. Aunque de momento está siendo revisada y objeto de una puesta a punto en el muelle Comercial, puede también trasladarse a una velocidad de cinco kilómetros por hora y, de esta forma, operar en el conjunto del recinto portuario.
El trabajo, apuntan fuentes de la compañía vilagarciana, se hace más rápido, pero también con mayor seguridad y una menor huella de carbono. Y, un punto no menos importante, redunda en una visión a medio y largo plazo de lo que acabará siendo el transporte por mar de mercancías. La razón se encuentra en que el diseño de este modelo de grúa se ha optimizado para las operaciones con buques Panamax (los barcos de dimensiones máximas que pueden atravesar el canal de Panamá) e incluso los denominados postPanamax (aquellos que superan esas magnitudes).
El mercado marca una tendencia clara a la utilización de embarcaciones cada vez mayores. Son buques que alcanzan pesos de setenta mil toneladas y calados de doce y trece metros.
El dragado del canal
Tanto Ferrazo como la ampliación del muelle Comercial disponen de esos trece metros. Sin embargo, en el canal de acceso al puerto existen un par de cotas de apenas 8,9. De ahí la importancia de que se solucione el problema ambiental relacionado con el punto de vertido de Sálvora y pueda llevarse a cabo su dragado.
Vilagarcía fue la segunda plaza estatal que experimentó un mayor crecimiento en el 2021
El 2021 que acaba de concluir será un ejercicio largamente recordado en el ámbito portuario de Vilagarcía. Por algo, los muelles arousanos fueron capaces de batir la marca del millón y medio anual de toneladas. Algo que diez años atrás, cuando la institución probaba el gusto amargo de su fondo en cuanto al volumen de tráficos, con 820.283 toneladas, se antojaba una pura quimera. Desde entonces, el Puerto ha ido experimentando un movimiento ascendente en el que tampoco han faltado episodios de retroceso ni otros dos años, el 2013 y el 2014, por debajo del millón de toneladas. Lo que suceda en este 2022 servirá, por tanto, para calibrar si esa barrera anual es un punto consolidable sobre el que continuar creciendo o, por el contrario, la fotografía de un instante.
Por lo pronto, las 1.511.188 toneladas que Vilagarcía firmó el año pasado supusieron un crecimiento del 24,9 % con respecto al balance del ejercicio anterior, el del 2020, el año en el que estalló la pandemia y los muelles registraron 1.209.822 toneladas. Este porcentaje apenas admite comparaciones entre los 28 puertos de interés general que constituyen el sistema portuario estatal. Únicamente Málaga, con un apabullante 62,5 %, aumentó sus tráficos en mayor medida que la capital arousana, que de nuevo está en condiciones de tutear a Ceuta (1.586.000 toneladas).
Por lo que respecta a los cinco puertos gallegos de titularidad estatal, Vilagarcía fue, con diferencia, el que más creció frente al 12.07 % de A Coruña, el 4,8 % de Vigo, el 4,39 % de Marín y el ligero retroceso, un 0,71 %, que padeció la plaza de Ferrol.