Xaquín Álvarez Corbacho, el alcalde comunista de O Grove que jugó en el Celta

Serxio González Souto
Serxio González O GROVE / LA VOZ

AROUSA

Xaquín Álvarez Corbacho había nacido en O Grove en 1942
Xaquín Álvarez Corbacho había nacido en O Grove en 1942 No disponible

Experto municipalista y catedrático de Economía Aplicada, Corbacho fue vicerrector de la Universidade de Santiago y conselleiro del Consello de Contas de Galicia

23 jun 2021 . Actualizado a las 16:55 h.

El peso de su trayectoria como investigador y su experiencia en los ámbitos universitario e institucional podrían dibujar a Xaquín Álvarez Corbacho con los trazos de un sesudo intelectual, absorbido por las exigencias de campos como la Teoría Económica del Federalismo Fiscal o las Haciendas territoriales, a los que aplicó su talento. Las apariencias, sin embargo, acostumbran a extraviar el fondo de las cosas y camuflar el verdadero carácter de las gentes. En su juventud, el profesor de Economía Aplicada, que llegó a ser vicerrector de la Universidade de Santiago de Compostela, la misma en la que se había doctorado, y conselleiro del Consello de Contas de Galicia, vistió la camiseta del Celta de Vigo durante cuatro temporadas, entre 1960 y 1964. Compitió en Segunda División, marcó un solitario gol y fichó por el Rácing de Santander, en el que jugó al menos durante un año más. Xaquín acaba de fallecer en O Grove, el lugar en el que nació hace 79 años y que gobernó como su primer alcalde tras la recuperación democrática.

En tierras de O Salnés, Álvarez Corbacho será recordado como uno de los grandes protagonistas de una experiencia única, la Asamblea Democrática de Arousa, que en los comicios municipales de 1979 consiguió aunar a diferentes fuerzas progresistas y permitió a la izquierda alcanzar gobiernos como los de Vilanova, Vilagarcía y O Grove, donde el catedrático ocupó la alcaldía durante dos años, partiendo de su militancia en el Partido Comunista. Su carrera académica lo llevó lejos. A las universidades de York y Leicester, por ejemplo. Pero jamás perdió de vista de dónde procedía, ni personal ni políticamente.

Colaborador habitual en las páginas de La Voz de Galicia, el municipalismo fue una de sus grandes preocupaciones. Muy próximo a Emilio Pérez Touriño, el último presidente socialista de la Xunta, su lúcida arquitectura de lo público pudo haber alumbrado una Galicia distinta desde sus mismas bases, las entidades locales. Las banderas del Concello grovense ondean a media asta, reflejando que hoy es un día de luto a orillas del mar de Arousa, adonde hace tiempo había regresado y donde reposarán sus restos.