La Guardia Civil detiene a dos personas por el tiroteo de Vilanova

Serxio González Souto
Serxio González VILANOVA / LA VOZ

AROUSA

Uno de los contendientes disparó sobre una de las viviendas que se abren a la carretera general que une Vilanova con Vilagarcía, en la parroquia de Caleiro
Uno de los contendientes disparó sobre una de las viviendas que se abren a la carretera general que une Vilanova con Vilagarcía, en la parroquia de Caleiro Mónica Irago

Fuentes de la investigación indican que se trata de los dos hombres que poco antes habían protagonizado una pelea a patadas y puñetazos en el paseo marítimo

30 mar 2021 . Actualizado a las 18:09 h.

Teniendo en la mano el vídeo sobre su enfrentamiento en pleno paseo marítimo, que un vecino de Vilanova pudo grabar desde su balcón, que la Guardia Civil localizase a los dos sujetos que el domingo por la noche intercambiaron patadas y puñetazos por lo que parecen diferencias de dinero era cuestión de poco tiempo. Esta mañana, la Comandancia de Pontevedra confirmó que dos hombres han sido detenidos por su relación con el tiroteo que poco después de aquella trifulca tenía lugar en la parroquia de Caleiro. De momento, no hay una explicación oficial sobre el motivo de la gresca, ni siquiera sobre el vínculo que pueda existir entre ella y los disparos que recibió la vivienda de uno de los dos individuos. Fuentes de la investigación aseguran, en cualquier caso, que los detenidos son los mismos que comenzaron la noche a palos para, por lo visto, concluirla a tiros.

Lo que parece claro, a la vista de lo ocurrido, es que conviene extremar el cuidado a la hora de escoger con quién se está jugando uno los cuartos. Una pelea a puñetazo limpio, desatada en pleno paseo marítimo de la villa arousana, concluyó minutos después a tiros frente a la vivienda de uno de los contendientes. Rematada la gresca que dio origen a todo lo demás, uno de los individuos que la había protagonizado siguió a su contrincante para acabar disparando un arma contra la fachada de su casa. Aunque no hubo heridos, los vecinos todavía tenían los pelos de punta por la mañana.

La Guardia Civil lo investiga, pero resulta complicado concretar todavía cuál fue el detonante de la pelea. Quienes asistieron a ella explican que al filo del toque de queda, poco antes de las diez de la noche, un automóvil se detuvo en el paseo de Vilanova, ocupando uno de los carriles de circulación frente a una pequeña tienda que va a ser inaugurada en cuestión de días. Entre uno que salía y otro que entraba, un tipo se abalanzó sobre el conductor mientras este trataba de regresar al vehículo e intentaba echar mano a algo que guardaba en el hueco de su puerta del coche. «Dáme os cartos, dáme os cartos», vociferaba el primero mientras desataba un remolino de patadas y puñetazos que dos mujeres se esforzaron en vano por impedir y un vecino del lugar pudo grabar con un teléfono móvil desde su balcón.

A esas alturas, el atasco que se había organizado en el paseo marítimo constituía un problema de primer orden para el tráfico de Vilanova, exacerbado, como en todas partes, por la proximidad del toque de queda. En un momento dado, el conductor del automóvil abandonó al volante el escenario de la trifulca, pero el enfrentamiento estaba lejos de haber concluido. Poco después de todo aquello, con la policía tomando nota de lo que había acontecido a un paso de la pasarela peatonal que conduce a O Terrón, alguien se presentó en la parroquia de Caleiro para descerrajar varios disparos contra la vivienda que ocupa uno de los dos improvisados duelistas.

Todavía no eran las once de la noche, y los vecinos del lugar en el que el sujeto abrió fuego, en un margen de la carretera general que comunica Vilanova y Vilagarcía, no daban crédito a lo que estaba pasando. «Estaba en casa y me alarmó el ruido de los disparos, que por lo menos fueron dos», señala un hombre que se asomó a la ventana al escuchar unas detonaciones que dejaron varios casquillos sobre el terreno.