El bipartito cambadés reconoce que el acuerdo para el presupuesto es difícil: «Non hai vontade de consenso»
AROUSA
Gobierno local y oposición se volvieron a reunir hoy; el PP y Pode critican la indefinición del documento y el BNG ni siquiera se pronuncia
04 mar 2021 . Actualizado a las 18:11 h.El gobierno local quiere dar carpetazo al presupuesto municipal del 2021 este mes, es decir, llevarlo a votación en el pleno de finales de marzo, pero el bipartito —que gobierna en minoría— todavía no tiene asegurados los apoyos necesarios para sacar el documento adelante hasta el punto de que el concejal de Economía e Facenda, Xurxo Charlín, reconocía este mediodía «que vai ser moi difícil chegar a un acordo, non hai vontade de consenso».
La lógica política indica que estos apoyos tendrían que llegarle del BNG, su antiguo socio de gobierno, pero el portavoz nacionalista, Víctor Caamaño, ni siquiera quiso hacer una valoración a la espera de poder estudiar en el seno de su grupo la documentación que le entregaron esta mañana. Los concejales Samuel Lago (PSOE) y Xurxo Charlín (Somos) emprendieron las negociaciones con la oposición con una ronda de contactos que comenzó a las 11 horas con el PP, continuó con el BNG y concluyó con Cambados Pode y el próximo jueves se repetirá el esquema. De momento, PP y Pode salieron de este encuentro con una pobre sensación. «Esperabamos algo un pouquiño máis traballado. Hai un hermetismo coas obras e así non podemos facer propostas, todo é moi raro», abunda Abal, que insiste en la necesidad de convocar la comisión de reconstrucción económica aprobada por el pleno a propuesta suya. Él, como el portavoz popular, echa de menos una información más detallada de las distintas partidas, especialmente las relativas al capítulo de inversiones. «Dinnos que non saben aínda que obras se van facer co Plan Concellos... nós, desde logo, o que pedimos é que se fagan máis obras nas parroquias», señaló Luis Aragunde.
Xurxo Charlín explica esta falta de concreción en cuestiones de tipo técnico -el presupuesto se eleva a 9,1 millones- y a su voluntad de incluir las propuestas de la oposición en el texto definitivo. Reprocha a la oposición falta de interés por acercar posturas. «Queren o documento para criticalo, non para construír, pero pola nosa banda imos seguir traballando e intentado chegar a un consenso», señaló el edil de Somos.
Además de los reparos expuestos, otro escollo a salvar es el relativo a los salarios para las liberaciones parciales de cuatro concejales del bipartito. El borrador del presupuesto incluye 124.000 euros para este fin —incluidas las retribuciones de la alcaldesa— cuando PP, BNG y Pode ya han votado en contra de esta cuestión en pleno hasta media docena de veces.
En lo que sí coinciden todos los grupos que se han pronunciado es en la necesidad de apoyar con ayudas al sector de la hostelería y en reforzar la partida para servicios sociales, que según el borrador presentado a la oposición, aumenta en 200.000 euros respecto al último presupuesto del 2018. Hoy, el PP pidió más personal para Servizos Sociais.