Alberto Blanco celebra el pase eslovaco a la previa del Mundial pero con otros retos en mente

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

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El técnico vilagarciano desea seguir al dimisionario Zan Tabak en su próximo proyecto deportivo

25 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La Federación Eslovaca de Baloncesto había contratado a Zan Tabak hace dos años con la misión de que colocara a su selección masculina sénior en posición de tener posibilidades de acceder a una gran cita internacional. Una misión para la que la ex estrella croata enroló al vilagarciano Alberto Blanco como segundo de a bordo en su banquillo. El pasado sábado, con su victoria 73-77 sobre Kosovo en la cancha de su rival, Eslovaquia accedió a la fase de clasificación para el próximo Mundial del deporte de la canasta. Solo que el conjunto eslavo tiene pinta de que tendrá que afrontar el reto con un cuerpo técnico completamente renovado.

Tabak comunicó el mismo sábado, tras certificar la plaza, que abandonaba la selección tras pagar la correspondiente cláusula de salida pactada en su contrato, que vencía en 2023. La misma duración que el de Alberto Blanco, sin vía pactada de escape, que la semana pasada probó su implicación con el proyecto eslovaco corriendo como nunca en su vida para atravesar el aeropuerto de Estambul y coger el último avión con el que llegar a Prístina, Kosovo, a tiempo de preparar su equipo los partidos frente a Islandia y Kosovo con su trabajo de scouting. Blanco declara que su deseo es «ir onde vaia Zan». Porque, añade, «non quero que me pase como con Marcelo -Nicola-», que lo había llevado al Lietuvos Rytas y que quiso contar con el arousano en el Hapoel Jerusalén y algún otro proyecto, pero al que no pudo seguir por seguir comprometido con el club lituano.