Aprender a leer y geografía a los 6 años siguiendo la estela del Titanic gallego

Bea Costa
Bea Costa VILANOVA / LA VOZ

AROUSA

Martina Miser

El naufragio del Santa Isabel, hace un siglo, inspira un proyecto educativo en Vilanova

16 dic 2020 . Actualizado a las 09:41 h.

El naufragio del Santa Isabel, ocurrido el 2 de enero de 1921 en las inmediaciones de isla de Sálvora, dio lugar a artículos de prensa, libros, exposiciones y hasta a una película, La isla de las mentiras. Quizá la historia de aquella tragedia llegase a las aulas también, pero en el colegio Xulio Camba de Vilanova pensaron que el suceso podía dar más de sí y se inspiraron en él para poner en marcha un proyecto educativo que ha traspasado fronteras.

Como en verano aún no estaba claro que pudiera haber clases presenciales este curso debido a la pandemia, algunos docentes, como Laura Lorenzo, buscaron fórmulas alternativas para adaptar las clases a las plataformas virtuales que pone a su disposición la Consellería de Educación. Finalmente no fue necesario quedarse en casa, pero en el Xulio Camba están igualmente trabajando con la plataforma Agueiro -un canal que funciona como una red social interna del centro- que está siendo de gran utilidad a la hora de armar este singular proyecto basado en el naufragio del Santa Isabel.

Martina Miser

No se trata de ofrecer un mero relato histórico sobre lo ocurrido aquel aciago 2 de enero. Aquel accidente sirve de punto de partida y de pretexto para estudiar, por ejemplo, la geografía y el clima de la ría de Arousa, su fauna y flora y practicar materias transversales como la lectura y la escritura. Las matemáticas se han quedado un poco cojas, reconoce Laura, pero el resto de los contenidos curriculares han quedado perfectamente cubiertos con estas singulares lecciones.

Aunque la profesora se permitió alguna licencia de ficción, como gravar un vídeo en el que aparece una botella que llega a la playa conteniendo el artículo sobre la tragedia publicado en su día en La Voz de Galicia, prácticamente todo el material que se ha empleado en el proyecto es real, desde documentos utilizados en la exposición itinerante sobre el Santa Isabel hasta los folletos informativos que reparte el Parque Nacional Illas Atlánticas. Y lejos de aburrirse, «todo isto motivounos moito», explica la docente.

La maqueta que les dejó un abuelo y el testimonio de la bisnieta de un cocinero del barco

A la hora de desarrollar este proyecto educativo se dieron felices casualidades, como que el abuelo de un alumno tuviese una maqueta del antiguo vapor y que una profesora que vive en Cádiz conociera la iniciativa del Xulio Camba gracias al todopoderoso Instagram y pudiera aportar su testimonio como bisnieta del segundo cocinero que iba a bordo del trasatlántico con rumbo a Buenos Aires.

Detalles como este permitieron a los alumnos descubrir que en un barco no solo van el capitán y los marineros. Además hay camareros, mecánicos y pasajeros que, como ocurría en este caso, emigran cruzando los mares en busca de un futuro mejor. Y los pequeños de primero descubrieron, además, que gracias a un grupo de mujeres heroicas que se lanzaron al mar se pudieron salvar 56 de las 269 tripulantes del llamado Titanic gallego.

El resultado de estas lecciones toma forma en los lapbook (cuadernos de trabajo) que cada alumno ha preparado a lo largo del último trimestre, en el que se incluyen dibujos, recortes y ejercicios hechos dentro y fuera del aula, porque en este proyecto tampoco faltaron salidas a la playa.

Este modelo educativo va ganando terreno en los colegios porque cada vez son más los docentes que apuestan por abordar los contenidos curriculares partiendo de la realidad más próxima al alumnado y sin necesidad de libros de texto. El resultado está a la vista. Niños de tan solo seis años de edad de Vilanova están ya en disposición de darles alguna lección a sus padres y abuelos sobre el trozo de historia que se esconde en el fondo de la ría.