Los pacientes covid que precisen hospitalización irán a Montecelo si se satura el hospital

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

En O Salnés, donde quedaban ayer once plazas libres, se han detectado positivos entre el colectivo de médicos residentes

08 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La dirección del área sanitaria Pontevedra-O Salnés confirmó ayer que médicos residentes (MIR) con plaza en el Hospital do Salnés han dado positivo en covid-19. La EOXI no explicita cuántos casos son, pero indica que «se ha procedido al estudio, identificación y cuarentena de los considerados contactos estrechos» de los citados facultativos. Desde la dirección del área insisten también en que «el protocolo preventivo por covid se activa en todo el distrito sanitario de O Salnés cada vez que epidemiológica y clínicamente se requiere en cualquier centro del área». Sin ir más lejos, el protocolo se activó esta misma semana tras dar positivo un paciente que iba a ser intervenido quirúrgicamente y que llevaba varios días ingresado en la segunda planta. Las pruebas realizadas a otros enfermos y al personal han dado negativo.

Ahora se abre un nuevo frente. Según fuentes hospitalarias, el contagio de los MIR ha generado cierta inquietud entre el personal, que en los próximos días podría ser sometido a nuevos controles PCR. En todo caso, lo que parece seguro es que esta es una de las cuestiones que se abordarán en la reunión del comité de Seguridade e Saúde que se ha convocado para este mismo lunes. En ese encuentro se van a tratar otras cuestiones que preocupan, y mucho, a los trabajadores sanitarios del centro de Rubiáns, como por ejemplo la falta de un sistema de control de acceso que limite las idas y venidas por el interior del centro sanitario, donde ni todos los usuarios cumplen las normas establecidas, ni hay quien se encargue de poner coto a esos comportamientos.

Otra de las cuestiones que se abordará en la reunión será el plan que se activará en el caso de que la planta covid del las instalaciones de Rubiáns acaben saturadas. Según trabajadores del centro, son 17 plazas las que han sido reservadas para este tipo de enfermos. Y ayer, según los datos facilitados por el Sergas, eran también 17 los enfermos covid ingresados en O Salnés.

El Sergas, por su parte, sostiene que aún quedan once camas libres, ya que «la planta cuenta con 28». Según la situación clínica de los pacientes, el hipotético incremento de presión asistencial y los recursos que se fueran empleando para esta cuestión en Arousa, «de necesitarse más hospitalización para esta patología, los pacientes se ingresarían en el área covid del Hospital Montecelo», explican desde el área sanitaria.

¿Y cómo está la situación en esta? Este sábado de inicio efectivo de las restricciones en las zonas de influencia de Pontevedra y Vilagarcía -municipios de Pontevedra, Vilaboa, Poio, Ponte Caldelas, Marín, Barro, Campo Lameiro, Cerdedo-Cotobade, Soutomaior, Vilagarcía, Vilanova, Cambados y O Grove- arrojó un saldo de 77 nuevos casos de covid-19 diagnosticados. La cifra es sensiblemente inferior al de positivos comunicados el día anterior, viernes, con 93 casos, pero suficiente para mantener todas las alertas activadas.

En términos globales, el dato positivo se encuentra en el ámbito de la hospitalización, ya que baja en el conjunto del área sanitaria al registrarse 67 pacientes hospitalizados en planta, siete menos que el viernes. Pero en ese cómputo general preocupa el Hospital do Salnés, donde se pasó de 14 pacientes ingresados el viernes a los 17 ya citados anteriormente. En Pontevedra, hay 49 pacientes en el Complejo Hospitalario (nueve menos que en el último recuento) y uno en el hospital Quirónsalud (el viernes eras dos). Lo que permanece inalterable es el número de pacientes ingresados en la unidad de cuidados críticos de Montecelo, que siguen siendo cuatro según el parte diario facilitado por la gerencia del área sanitaria Pontevedra-O Salnés.

En cuanto al número de pruebas PCR realizadas en las últimas 24 horas en esta zona de la provincia de Pontevedra, fueron 1.080, con lo que se superan ya las 71.000 desde que el inicio de la pandemia.