La primera de las incautaciones se realizó en un galpón de Meis
16 dic 2019 . Actualizado a las 22:33 h.La cantidad es importante. Nada menos que 1.200 litros de aguardiente, que da para unas cuantas queimadas y para cientos de miles de gotas en los cafés.Esa fue la cantidad que la Guardia Civil se incautó en los últimos meses en distintos puntos de la provincia de Pontevedra. Las actuaciones llevadas a cabo por la Patrulla Fiscal y de Fronteras de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, en estrecha colaboración con la Oficina Gestora de Impuestos Especiales de Pontevedra (AEAT), se desarrollaron en distintos municipios de la provincia con la finalidad de comprobar el cumplimiento de la normativa sanitaria y fiscal por la que se rige la elaboración, distribución y venta de este tipo de bebidas alcohólicas.
Todo comenzó en octubre en un galpón de Meis. Allí se estaban realizando labores de destilación artesanal utilizando un alambique no estaba censado. A partir de ahí saltó la liebre y se sucedieron los descubrimientos de más casos. Días más tarde, a principios de noviembre, se localizó otro galpón en el municipio de Vilaboa en las mismas circunstancias.
En ambos casos, la Patrulla Fiscal y Fronteras procedió al precinto de los dos alambiques y a la inmovilización de cerca de 400 litros de aguardiente. Al mismo tiempo se levantaron varias actas denuncia por infringir la normativa que regula la Ley y el Reglamento de Impuestos Especiales, habida cuenta de los responsables no pudieron acreditar el pago del impuesto devengado por esta actividad, carecían del código de actividad y establecimiento y no disponían de la preceptiva autorización para llevar a cabo la destilación.
Salvaterra de Miño fue el escenario de la tercera de las incautaciones. Allí, la Guardia Civil inspeccionó otro galpón donde se estaba destilando aguardiente fuera del periodo de tiempo que tenía autorizado. En esta instalación se intervinieron cerca de 900 litros de aguardientes por no acreditarse la autorización para su destilación ni el pago del impuesto devengado. Al mismo tiempo se incautaron 248 precintas fiscales y un alambique.
El saldo final es de cuatro alambiques y algo más de 1.200 litros incautados en las tres inspecciones realizadas.