El comercio local de Arousa soporta el Black Friday por imperativo legal

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

Ninguna asociación promueve un viernes negro que muchos negocios asumen por una cuestión de mera supervivencia

29 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La fórmula que los comerciantes estadounidenses se sacaron un buen día de la manga, perfecta para arrancar la temporada de ventas navideñas tras su célebre e intransferible día de acción de gracias, campa a sus anchas por escaparates y almacenes de todo el orbe. Le pese a quien le pese, el Black Friday ha venido para quedarse. Hubo un tiempo en el que el comercio de Arousa acogió la idea con los brazos más o menos abiertos. Ese tiempo ha pasado. Aunque sus representantes confiesan que este saldo prenavideño genera una abierta controversia entre sus miembros, la mayoría del sector soporta ahora a regañadientes una campaña ante la que advierte el riesgo de acabar con la verdadera madre del negocio y del consumo en invierno: las fiestas de diciembre y enero.

«Nós como asociación estamos en contra do Black Friday; o problema é que hai xente que non pode facer outra cousa se quere vender algo nesta época do ano», admite la presidenta de Zona Aberta. El colectivo de Vilagarcía alerta de que muchos comerciantes lo están pasando bastante mal ante lo que perciben como un frenazo del consumo y un mal otoño, que el viernes negro puede acabar de rematar.

Verdaderamente, resulta complicado que los establecimientos especializados en los electrodomésticos, el textil o el calzado puedan sustraerse a colgar el cartel negro de sus escaparates. Algo así como el juramento por imperativo legal. Se hace si no queda otro remedio, impelidos por la ley que impone una costumbre que sube como la espuma. «Hai unha importante división, pero a maioría dos socios non están en sintonía co Black Friday; pasou de ser un día a ser unha semana, e como sigamos así estaremos botando pedras contra os nosos propios tellados», subraya María Gómez, gerente de Emgrobes. La asociación tampoco impulsa un viernes negro que en O Grove tiene particular incidencia en el sector de los electrodomésticos, tirando en muchas ocasiones de estocaje, las tiendas de ropa o las ópticas.

Algo semejante ocurre en Cambados. Juan Rey, presidente de Zona Centro, recuerda que hace años los asociados demandaban carteles del viernes negro: «Agora a xente agarda ao Nadal e vexo que este ano hai menor agresividade na promoción do Black Friday». Después de iniciativas como el desfile de moda o la feria de oportunidades, el colectivo prepara ahora su programa navideño. Papá Noel o el Apalpador contra el chapapote USA.