El PPdeG rehabilita a Tomás Fole y lo nombra asesor de Vicepresidencia

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

El exalcalde se incorporará al equipo de Alfonso Rueda tras varios meses apartado de la vida política

16 nov 2019 . Actualizado a las 20:14 h.

Cuando el Congreso de los Diputados fue disuelto a raíz de la convocatoria de las elecciones generales de abril, Tomás Fole dijo adiós a 16 años en primera línea de la vida política. El exalcalde de Vilagarcía, uno de los dos únicos políticos conservadores que han conseguido levantar el bastón de mando en democracia, iniciaba entonces su particular travesía del desierto. Fue apartado de la candidatura popular para ser sustituido por Elena Suárez, que ocupó el número tres de aquella lista para fracasar en su intento de renovar los tres escaños para la gaviota por Pontevedra. El PPdeG, que parecía haber desbancado definitivamente a Fole de su cartera de valores activos, acaba, sin embargo, de rehabilitar su figura para el desempeño político. En esta ocasión, como asesor de la Vicepresidencia y Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza de la Xunta.

Fole Díaz, que presidía el partido en la capital arousana desde el 2003, anunció en noviembre del 2016 su marcha a Madrid. La candidatura del Congreso había corrido y para él se abría la oportunidad de conocer el trabajo desde el foro de la soberanía popular. «Me siento, la verdad, como un niño con zapatos nuevos», confesaba el exregidor mientras dejaba la cabeza local del PP. Pronto se cumplirán tres años desde aquello. Once meses después, abandonaba también la portavocía del grupo municipal.

El hombre hizo su trabajo en la capital, pero desde el principio pareció claro que lo que la dirección conservadora buscaba era despejar el camino para Alfonso González Gallego, su sucesor al frente de la agrupación vilagarciana, sin que importase demasiado qué sería de Fole en la siguiente legislatura.

Los vaticinios se cumplieron. Tras los comicios de abril, Fole se brindó a echar una mano en la inminente campaña de las municipales. No dejó de acudir a los actos que su partido programaba en la ciudad, pero fue situado, siempre, en un segundo plano. Sin excepción. El legado de sus cuatro años en la alcaldía, más que algo a reivindicar, se manejaba como un problema a olvidar. Ahora, el exregidor vuelve al terreno de juego como miembro del equipo de Alfonso Rueda.

Una agrupación en horas bajas, privada de un referente claro en Vilagarcía

Tomás Fole pisa ya la moqueta de San Caetano y del Parlamento de Galicia. Su nombramiento como asesor de Vicepresidencia, lejos de Vilagarcía, coincide con un momento particularmente bajo de la agrupación conservadora local. La gaviota no ha logrado levantar el vuelo tras la derrota de mayo a manos del PSOE de Alberto Varela, encumbrado a la tercera mayoría absoluta de la democracia. Nunca el centro derecha había descendido en la capital arousana por debajo de la barrera de los siete concejales. Ahora, sin embargo, las cinco actas del PP y el solitario vocal de Ciudadanos limitan su representación a seis ediles.

La persona con más experiencia del grupo municipal, renovado a fondo, es Ana Granja. Y al margen de Alfonso González Gallego como portavoz, el protagonismo se le suponía a su número dos, el empresario Miguel Ángel García, que ganó extraordinaria visibilidad durante la campaña para acabar tirando la toalla a las primeras de cambio. Las relaciones internas, por lo que se refiere al partido, tampoco gozan de buena salud. Fole sigue lejos, pero Rueda no deja de ser el presidente provincial del PP. Y el año que viene hay autonómicas.