Máquinas que emplean la fotografía para evaluar la salud de una cepa

Maruxa Alfonso Laya
m. alfonso REDACCIÓN / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

Martín Códax participa en un proyecto que usa las nuevas tecnologías para luchar contra el cambio climático

02 nov 2019 . Actualizado a las 20:42 h.

La revisión anual de los viñedos es, actualmente, una labor manual, rutinaria y costosa que los viticultores deben realizar todos los años para marcar aquellas plantas de vid que están muertas o enfermas. Pero este sistema podría cambiar radicalmente en breve. Martín Códax está participando en el proyecto Globalviti que, entre otras cuestiones, está diseñando una plataforma tecnológica que emplea la inteligencia artificial. Esta está preparada para clasificar las plantas en función de su estado sanitario utilizando para ello fotografías de satélites o drones.

Globalviti es un proyecto consorciado del que forman parte ocho empresas, entre ellas algunas tan conocidas como Familia Torres, Pago de Carraovejas o la propia Martín Códax, y trece organismo de investigación de referencia nacional. Su principal objetivo es el de aprovechar las nuevas tecnologías digitales para hallar alternativas y soluciones a algunos de los problemas más importantes causados por los efectos del cambio climático en los viñedos. Cuenta para ello con un presupuesto de 8,8 millones de euros y culminará en julio del próximo año.

En Globalviti colaboran ocho bodegas españolas y trece organismos de investigación Una de las líneas de investigación en las que está trabajando este programa es en la de desarrollar nuevas estrategias de gestión del viñedo para paliar los perjuicios causados por patologías como las enfermedades de la madera. En este marco de trabajo se incluye la nueva plataforma digital que utilizará la inteligencia artificial y un algoritmo para evaluar, de forma continua, el estado sanitario de cada una de las plantas de la vid.

 

Una base de 30.000 imágenes

El proyecto ha entrado en su fase final, que incluye una laboriosa tarea para calibrar el sistema. Los técnicos han diseñado una base de datos real de más de 30.000 fotografías procedentes de viñedo de las bodegas participantes. Las imágenes serán clasificadas previamente por investigadores expertos desde el punto de vista de su estado sanitario, es decir, si la cepa esta viva, muerta o enferma. A partir de esa clasificación, se enseñará al sistema a revisar y clasificar, de forma automática, el estado de cada planta de vid en función de las imágenes tomadas y sin necesidad de la presencia in situ de un experto. Esta nueva plataforma digital constituirá una importante novedad tecnológica para el sector, así como una alternativa real y económica para los productores.

Aplicación de fitosanitarios

Otro de los objetivos de este programa es el de desarrollar nuevos equipos y tecnologías, a nivel de prototipo, para su uso en viticultura. Uno de los campos en los que se está trabajando es en la aplicación de los fitosanitarios, con el desarrollo de un sistema inteligente que permita mejorar la eficiencia de estos tratamientos. Y es que uno de los principales problemas con los que se encuentra el viticultor actualmente es que buena parte de estos productos se dispersa en el entorno y no llega a la vid. Este nuevo sistema incorpora soluciones innovadoras para mejorar esa eficiencia. El prototipo ya ha sido validado en los viñedos de dos de las bodegas que forman parte del consorcio, mostrando una alta homogeneidad en las aplicaciones. Su eficiencia final se contrastará con el análisis de los resultados en campo, así como con otros sistemas atomizadores ya en uso.

Todo los resultados de estos proyectos se están poniendo ya en común en los comités del consorcio Globalviti, con el objetivo de que la transferencia tecnológica y la búsqueda de sinergias entre los socios abra nuevas expectativas a la hora de hallar soluciones a los problemas existentes en la viticultura, muchos de ellos, provocados por el cambio climático.