Los terrenos se acondicionarán como zona de recreo
31 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Medio siglo después de su construcción, las casas escolares del Antonio Magariños (Cambados) pronto pasarán a la historia. Ayer concluyó el plazo de presentación de ofertas para que las empresas opten al contrato de derribo de las viviendas y, según informa la Consellería de Educación, un vez cumplido el trámite de adjudicación, las obras serán inminentes.
Se tirarán las doce viviendas que ocupan la parte norte del recinto escolar, que están deshabitadas y en un estado ruinoso en su mayor parte. Hasta hace poco, dos de ellas estaban siendo utilizadas como almacén y local de la AMPA, pero desde la consellería no se plantean su conservación dado el mal estado de los inmuebles.
La parcela, de alrededor de tres mil metros cuadrados, quedará libre de construcciones y se dedicará a patio escolar. El terreno se regularizará, eliminando las soleras, los pavimentos y cierres existentes vinculados a las viviendas.
Nuevo vallado
También se podarán los árboles y se actuará en parte del cierre de la parcela; el cercado norte se levantará para construir uno igual al existente, de sillares de granito, y el del este se saneará y se completará con una malla metálica, según informa la consellería. Las obras salen a licitación con un presupuesto de 152.512 euros.
Este proyecto permitirá al colegio Antonio Magariños ganar un patio amplio del que carece, pero las pretensiones del Concello iban más allá. En el anterior mandato, siendo concejal de Educación Víctor Caamaño, se cursó una petición a la Xefatura Territorial de Educación por la cual se planteaba la desafectación de las casas escolares con el fin de ganar estos terrenos para uso público.
La propuesta pasaba por reservar esta parcela para uso escolar durante el horario lectivo y, por las tardes, festivos y fines se semana utilizarlo como parque público. A mayores se habilitaría una zona para aparcamiento de autobuses.
Pero desde la consellería desaconsejaron este proyecto y optaron por mantener la parcela para uso exclusivo del colegio, en previsión de futuras ampliaciones.