El conflicto del Valle-Inclán evidencia la falta de plazas geriátricas en Galicia

Bea Costa
bea costa VILANOVA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

Centros de la comarca empiezan a recibir llamadas de familiares buscando una alternativa al de As Sinas

24 oct 2019 . Actualizado a las 11:18 h.

La confusión se mantiene en relación a la residencia geriátrica Valle-Inclán (Vilanova). La empresa no facilita datos precisos sobre el número de afectados por el desalojo de usuarios que se hará efectivo el 30 de noviembre y sigue habiendo versiones contradictorias respecto a si el centro cerrará o no definitivamente sus puertas después de esa fecha. Lo que es plausible es la desesperación de algunas familias ante el futuro incierto de sus mayores. Quien más quien menos ha empezado a llamar a otras puertas en busca de un lugar donde cuiden a sus padres y encontrarlo no está siendo fácil.

Varias residencias consultadas por este diario confirmaron ayer que el conflicto del Valle-Inclán ya se ha empezado a notar porque están recibiendo solicitudes procedentes del centro vilanovés. Pero la oferta disponible, máxime si se trata de plazas concertadas, resulta claramente insuficiente para cubrir la demanda.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda cinco plazas en residencias por cada cien personas mayores de 65 años mientras que la ratio en Galicia se sitúa en tres plazas por cada diez, y de esas, la mayoría son privadas. Según los datos ofrecidos ayer por la Consellería de Política Social, a día de hoy existen en la comunidad 8.000 plazas públicas y 13.300 privadas. Las listas de espera son una constante en las residencias gallegas -en febrero del año pasado había más de 1.500 personas esperando por entrar en un centro- y este panorama deja pocas opciones a los usuarios del Valle-Inclán que deben marcharse de Vilanova en poco más de un mes. Y a ellos, un centro de día no les resuelve la papeleta, pues sufren una dependencia severa que requiere cuidados especiales. 

Plazas públicas en Galicia: 8.000

Supone un incremento del 42 % respecto a 2009, según los datos de la Xunta

Plazas privadas. 13.300

En residencias distribuidas por las cuatro provincias

La oposición pide soluciones a la Xunta y critica la política de Feijoo

La situación del geriátrico Valle-Inclán es bien conocida en el Parlamento gallego, no en vano ha habido varias iniciativas en relación a este centro, la última se debatió en abril. Entonces, todos los grupos de la cámara aprobaron una resolución por la que pedían a la Xunta una solución para esta residencia, que pasaba por garantizar su apertura frente a la orden de cierre que pesa sobre la misma. En aquel acuerdo también se instaba al Gobierno gallego a incrementar las plazas públicas en la comarca de O Salnés y desde la oposición recordaban ayer que esta necesidad sigue sin atenderse. «Desde que goberna Feixó houbo cero prazas públicas», señalaba la diputada del BNG, Montse Prado, no sin antes acusar a la Xunta de complicidad en la precaria situación que vive el centro de As Sinas desde hace seis años. Julio Torrado y Paula Verea, del PSdeG-PSOE y En Marea, respectivamente, incidieron en las críticas por la escasez de plazas geriátricas y por la política del PP que, sostienen, favorece la iniciativa privada en detrimento de la esfera pública. «O sistema público é unha garantía fronte ás eventualidades do sistema privado, e o caso do Valle-Inclán é un exemplo», indicó Torrado.

Por su parte, desde Política Social apuntan que la oferta de plazas públicas en geriátricos aumentó un 42 % con respecto al año 2009 y que la de centros de día se multiplicó por tres.