El hombre arrasó una terraza con su coche y huyó cuando se le iba a practicar la prueba de alcoholemia
11 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La Policía Local de Vilanova vivió en la noche del pasado viernes un suceso que bien podría calificarse de esperpento. J.L.I.G, un vecino de la localidad de 53 años de edad, protagonizó una serie de altercados que podrían salirle bien caros. Porque se le acusa de un delito contra la seguridad vial, de otro de insultos y amenazas y de un tercero de daños ocasionados en una terraza. Todo empezó a las nueve de la noche.
Cuentan los agentes que el individuo, tras discutir con el propietario de un bar, cogió su coche y se llevó por delante la terraza del establecimiento que, por suerte, estaba vacía. El dueño del negocio alertó a la Policía Local, que inició su búsqueda. Lo encontró en la zona del puerto, donde lo requirió para hacerle la prueba de alcoholemia. Cuando el agente estaba informándole de que estaba obligado a hacerla, el hombre se tiró al mar y se marchó nadando mientras amenazaba e insultaba a los agentes.
Al ver que en las proximidades había un barco, empezó a simular que se ahogaba, eso sí, se tapó la nariz con una mano para que no le entrase agua. El patrón del barco corrió en su auxilio y lo trasladó al otro extremo del puerto. Allí volvió a escapar de los agentes, escondiéndose en los barcos amarrados. Ante el temor de que volviese a tirarse al agua, y dado que estaba perfectamente identificado e informado de la responsabilidad penal de sus hechos, la policía desistió de atraparlo y retiró su coche al depósito municipal. Los agentes instruyeron las diligencias por los numerosos delitos cometidos por este individuo, famoso en la localidad por haber protagonizado altercados similares.