Propone a Greenpeace que sus actividades abiertas se desarrollen el fin de semana, cuando el muelle carece actividad
24 jul 2019 . Actualizado a las 13:46 h.Falta la conformidad oficial de Greenpeace, pero la cosa parece prácticamente hecha. Tras cuatro días de dudas, de comunicaciones cruzadas, de debates sobre seguridad e incluso de hemeroteca, la Autoridad Portuaria de Vilagarcía pulió esta tarde una propuesta razonable e inteligente para que la capital arousana no pierda la oportunidad de recibir la visita del mayor símbolo de la lucha por el medio ambiente en el planeta. El Rainbow Warrior III, el buque insignia de la organización ecologista, podrá atracar en el muelle de O Ramal.
Para que la escala se haga realidad, la institución que preside Sagrario Franco plantea una condición: que las actividades de la campaña En marcha por el clima, desde las jornadas de puertas abiertas a los talleres informativos, se desarrollen el fin de semana, momento en el que el muelle no está prevista ningún operativo portuario ni movimiento en sus almacenes. Lo que el Puerto no autorizará es el concierto previsto a bordo, «por razones logísticas y de seguridad».
El Puerto mantiene, en efecto, sus reservas en materia de seguridad y apela a la normativa que regula el acceso público a las áreas de actividad y endureció sus restricciones hacia el 2004. No obstante, «considerando el interés potencial de las visitas para la ciudadanía, la Autoridad Portuaria ofrece a la organización la puesta en marcha de un dispositivo el fin de semana». El equipo portuario subraya que su intención ha sido, en todo momento, facilitar la escala del Rainbow Warrior, pero recuerda, también, la premura con la que se tuvo que abordar todo este proceso, una vez que el presidente de Vigo, Enrique López Veiga, arremetió el viernes pasado con dureza contra la oenegé tras negarle los permisos para llevar a cabo en sus muelles su programa de concienciación sobre el cambio climático.
El Puerto explica, por último, que esta alternativa le exige un «esfuerzo muy importante en cuanto a la logística y a los medios humanos a emplear». Una tarea en la que el alcalde de Vilagarcía, el socialista Alberto Varela, ha brindado a Sagrario Franco la colaboración del Concello.
Existe otra posibilidad, el fondeo del Rainbow Warrior en la ría y el establecimiento de embarcaciones lanzadera para acercar a los visitantes desde los muelles de Vilagarcía. Pero el procedimiento se antoja mucho más complicado. Si nada se tuerce, el legendario buque surcará el mar de Arousa en cuestión de horas.
