Thune Eureka exporta tecnología minera para Tanzania y Riotinto

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

La factoría de Bamio sirve dos piezas de 45 toneladas y recupera un tramo de actividad que no trabajaba desde hace 28 años

01 sep 2021 . Actualizado a las 22:18 h.

El término multicoil no le dirá nada a la inmensa mayoría de la gente. Se trata de un pequeño prodigio de la técnica que, más allá de sus virtudes y de su eficacia, guarda su importancia para los intereses empresariales de la comarca. Esta es la denominación de dos piezas con las que una de las principales industrias de Vilagarcía, Thune Eureka, recupera una actividad en la que no había trabajado desde hace 28 años. Con una masa de 45 toneladas cada una, ambas constituyen uno de los encargos de mayor porte que se hayan facturado en la planta de Bamio. Su destino, como el 95 % de cuanto se produce en las instalaciones arousanas, se encuentra en la exportación. Un cliente noruego las colocará en una explotación de cobre ubicada en Tanzania y en las minas de Riotinto.

El director de Thune Eureka, Manuel García, explica que, a grandes rasgos, los multicoil se emplean como secadores de fango al servicio de la industria minera. Fangos que, normalmente, contienen ácidos corrosivos. Las piezas se configuran como una secuencia de aros especiales, elaborados con diferentes materiales y distintos procedimientos de soldadura. El resultado es un mecanismo que puede trabajar a una temperatura interior de 200 grados centígrados -el secado se lleva a cabo a base de vapor- con un importante factor de resistencia frente a la corrosión.

Dado el cometido para el que han sido diseñadas, las piezas son sometidas a un exhaustivo proceso de comprobación. Por ejemplo, pruebas de hasta 45 kilogramos de presión para comprobar que no hay fugas. Tanto cada aro como el conjunto. Su vida útil se calcula en unos diez años, siempre que se ejecute un mantenimiento eficaz y constante.

«La homologación y la comprobación, y las inversiones que exigen, son tan importantes como la fabricación en sí», advierte García. Estos y otros encargos se hacen realidad gracias a la ampliación que Thune Eureka acometió hace cinco años. Aquella inversión, de dos millones y medio de euros, permitió a la fábrica ganar 1.200 nuevos metros cuadrados de actividad y consolidar su plantilla en setenta puestos de trabajo. Tan fundamental como el esfuerzo en espacio y utillaje es la constante formación de su plantilla. Personal altamente cualificado y homologado en distintos procesos que, en su práctica totalidad, está enraizado en Vilagarcía y su entorno, lo que refuerza el vínculo y el compromiso de la empresa con la comarca.

Una clara recuperación

Después de dos ejercicios discretos, marcados por la caída de precios del petróleo, que junto a la industria del papel son sus dos grandes fuentes de trabajo, Thune Eureka está a punto de batir un récord de facturación: doce millones de euros al cabo del año.

70

Puestos de trabajo

La cualificación y la formación de sus trabajadores son una de las banderas de la empresa.

95 %

Exportación

Noruega, Alemania y Gran Bretaña se encuentran entre sus principales clientes.

12.000.000 €

Récord de facturación

Supondrá, al cabo del año, que Thune Eureka duplique la facturación del 2018.