España retiene un barco portugués para investigar si pescó cigala en zona vedada

E. Abuín REDACCIÓN / LA VOZ

AROUSA

Interceptó al arrastrero con 181 kilos de crustáceo que no había anotado en el diario

09 jul 2019 . Actualizado a las 19:20 h.

El Gobierno español ha inmovilizado un barco portugués de armador gallego mientras investiga y dilucida si la cigala que tenía alijada en las bodegas había sido o no capturada en una zona en la que la pesquería de esta especie está cerrada desde hace ya casi tres años. Fue el viernes pasado cuando el servicio marítimo de la Guardia Civil de A Coruña, en el marco de ese acuerdo de colaboración por el que el departamento de Planas paga seis millones de euros al de Grande-Marlaska, trasladó a los inspectores hasta un barco de bandera portuguesa que faenaba fuera de aguas territoriales -es decir, más allá de las 12 millas-, a la altura de Fisterra. En esa revisión, los funcionarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que iban con la Guardia Civil encontraron un total de 181 kilogramos de cigala a bordo, una especie cuya captura está vedada desde el 2017 en la zona VIIIc -que se extiende desde Fisterra hacia al golfo de Vizcaya-, pero que sí se puede capturar en la IXa -de Fisterra hasta el golfo de Cádiz-.

Como la embarcación intervenida -un arrastrero de litoral que tiene base oficiosa en el puerto de A Coruña- se localizó a la altura de Fisterra es difícil determinar la procedencia de las capturas, máxime cuando la cigala que fue encontrada a bordo no había sido apuntada en el diario electrónico de pesca (DEA).

De todos modos, fuentes próximas al Ministerio de Pesca señalaron que el barco fue apresado atendiendo a la instrucción de ese departamento de que cualquier embarcación, con bandera del Estado miembro que sea, que cometa una infracción grave sea detenido. Y al luso se le achacan tres. Eso determinará también la cuantía de la fianza que tendrá que depositar el armador del barco antes de que este pueda volver a salir a faenar. 

Las mismas fuentes aseguran que la cigala fue capturada en la zona VIIIc, donde está prohibido extraer cigala.

Sin plano de las bodegas

Aparte de no tener anotadas en el diario de pesca las capturas, la Guardia Civil y los inspectores comprobaron que el pesquero carecía de un plano de las bodegas visado por la autoridad competente -otra falta administrativa-. Ante la gravedad de las infracciones, los trabajadores del Ministerio de Agricultura, decidieron inmovilizar el pesquero y dieron al armador la posibilidad de que decidiese el lugar en el que amarrar intervenido en tanto no resolviese el caso la autoridad competente. Ahora son los funcionarios del Ministerio de Agricultura y Pesca los que instruyen el expediente.

Como el armador es de A Coruña, ese fue el puerto que eligió y allí permanece amarrado desde el viernes pasado. En esa lonja, la del Muro, fue también donde el viernes se pesó la cigala que llevaba a bordo el arrastrero de litoral portugués. Y, por supuesto, el banco de alimentos coruñés fue el destinatario de esos 181 kilos que fueron decomisados.