El Cortegada continuará en la LF2 cargado con 77.000 euros de deuda en las piernas

El baloncesto arousano podrá seguir contando un año más, y ya van tres décadas, con un equipo en categoría estatal de la mano de la Agrupación Deportiva Cortegada. La asamblea del club decidió a última hora de la tarde de ayer mantener a su primer equipo en la Liga Femenina 2; pero no a cualquier precio. El conjunto vilagarciano saldrá a competir con una plantilla formada entre un 60 y 70 % por jugadoras de su base, entre las que completaron la presente temporada en sus filas, y varias de las canteranas que en los últimos años tuvieron que declinar continuar en las mismas, o incluso ni siquiera poder disfrutar del salto al, hoy por hoy, buque insignia del deporte de la canasta en la comarca. Una decisión nacida de la necesidad, y adoptada tristemente por los siete socios contados que acompañaron a la representación de la directiva encabezada por el presidente, Ramón Estévez, y el vicepresidente y portavoz José Gorgoso.

Tal es la situación de apuro del Cortegada, que por primera vez desde que el final de patrocinio de Extrugasa en el 2011 abría una gran sima económica a sus pies, los responsables de la entidad se permitieron cifrar abiertamente y con números redondos la deuda que durante la última década ha venido lastrando al club desde la conclusión de los tiempos felices de la Eurocup. Una losa de 77.000 euros cargará sobre las piernas del primer equipo vilagarciano cuando se acabe de cerrar el presupuesto del presente curso. Con 150.305 euros de ingresos y 182.125 de gastos asentados, a los que hay que añadir los 88.339 euros pendientes de cobro, en su gran mayoría correspondientes a todas las subvenciones anuales de las administraciones y entes públicos, además de los 45.000 euros de la póliza de crédito abierta desde hace años y un crédito por otros 35.000 que hubo de suscribir la directiva en diciembre obligada por pagos urgentes, desde nóminas de las jugadoras a sus cuotas a la Seguridad Social.

Gorgoso, que recordó el mazazo del pufo de 70.000 euros dejado por el patrocinio impagado por la quebrada Feel, manifestó la intención de la directiva de liquidar la deuda del club en 2-3 años. De ahí la necesidad de soltar lastre. Previendo la contratación de una única foránea, comunitaria, además de un par de jugadoras nacionales de garantías, con Rubén confirmado de nuevo como entrenador; esta vez sin la compañía de Diana Piñeiro, que por razones laborales no podrá continuar de segunda en el primer equipo.

La directiva y los socios cargaron con dureza en la asamblea contra el gobierno local de Vilagarcía. Recriminándole que solo consigne 2.000 euros para el Cortegada pese a su labor de promoción de la localidad por España y de generación de movimiento económico. Pero también «que nunca nos chamen para preguntar ‘¿Como estades?’», y que «parece que hai empresarios que indicados polo Concello dan diñeiro a... en vez de repartilo entre todos os clubs», en clara referencia al dinero donado por el dueño de Frinsa al Arousa esta temporada.

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