Iago Carrasco: «Lo hemos olvidado, pero en el 2009 operamos 44 trenes en cinco meses»
AROUSA
Carrasco es un firme defensor del puerto, que en su opinión necesita un dragado y más almacenamiento en segunda línea
12 jun 2019 . Actualizado a las 21:05 h.PJ Carrasco fue el último operador portuario que utilizó el tren en Vilagarcía. En el 2009, se movieron 44 ferrocarriles entre el 7 de agosto y el 31 de diciembre. Sucedía en pleno verano. «Parece que lo hayamos olvidado, pero esto quiere decir que, bien coordinado, el tren no debe causar tantos problemas», reflexiona Iago Carrasco.
-Se habla mucho del tren, sí.
-El nuestro es un sector en el que la infraestructura debe estar siempre antes que la demanda. Si un cliente quiere emplear el tren y aquí no existe, acudirá al puerto de al lado. Lo mismo sucede con los almacenes o las grúas. El proyecto del tren se desarrolló en plena crisis y tardó mucho tiempo. Pero está en marcha y las perspectivas son buenas. Boluda opera trenes en Alicante, Sevilla o Bilbao semanalmente. La intermodalidad es el futuro de la logística, favorece el comercio y la actividad económica. Ayudamos a nuestros clientes y eso conlleva crecer y ser competitivos.
-¿Cuál es la diferencia entre tener o no un puerto como este?
-Para empezar, solo existen 29 puertos de interés general en España. Así que no dejas de estar en primera división. Es una herramienta para las empresas del área de influencia, que mejoran su competitividad en la exportación y la importación. Gracias a Boluda, las empresas pueden realizar pequeños envíos. Por otra parte, proyectos como el de Aceites Abril generan producto de alto valor añadido que después se venden en el extranjero.
-¿Qué hay de la atracción de nuevas empresas?
-Ahí está uno de los deberes del puerto de cara al futuro. Deberíamos ser el puerto de O Salnés, ayudando a captar empresas que se asienten en los polígonos de Vilagarcía, pero también de Vilanova o de Nantes. Estar cerca de un puerto de interés general mejora los costes logísticos de las empresas internacionales. Wärtsilä, el primer fabricante de motores del mundo, pasó de Portugal a O Porriño. ¿Por qué? Esas sinergias entre concellos deben funcionar. Atraer empresas potentes que desarrollen su actividad en nuestra área de influencia. Eso genera puestos de trabajo directos e indirectos.
-Es decir, que hay potencial.
-Sí, hay mucho potencial por desarrollar. La presencia de Boluda, insisto, permite que empresas que son capaces de producir la cantidad de mercancía que cabe en un contenedor puedan exportar. No hace falta ser una multinacional. En tiempos de crisis, uno de los datos más relevantes fue comprobar cómo las pequeñas y las grandes empresas suplían la falta de ventas a nivel local con ventas a nivel internacional. De hecho, estamos exportando más que antes de la crisis. Y eso nos lleva a otra consideración.
-¿Cuál es?
-Cuanto más grande es un barco, más barato resulta el transporte. La economía de escala es así. Los buques son cada vez más grandes y en Vilagarcía hemos trabajado para tener trece metros de calado. Pero el esfuerzo está a un 60 %, no se pueden usar porque solo tenemos nueve metros en el canal de entrada. Con la marea, como máximo tenemos once. Marín dispone de trece, Vigo de quince. Y siguen trabajando en dragar. Hay gestiones que no han llegado a buen fin única y exclusivamente por esta cuestión. Necesitamos un dragado.
-¿Qué otros deberes tenemos por delante?
-Precisamos zonas de almacenamiento en segunda línea. La mayoría de las mercancías están prácticamente en el cantil del muelle. No hay problema con la línea de atraque. De hecho, entre Ferrazo, Comboa y el muelle Comercial podríamos tener doce barcos atracados al mismo tiempo. Pero sí con ese espacio de almacenamiento. En general, necesitamos que las Administraciones trabajen con una perspectiva global. Y hacerle ver a la ciudadanía que el puerto puede ser un generador de trabajo de forma directa e indirecta. No solo es polvo y ruido, sino una de nuestras principales industrias.