La renovación de Rafa Sáez, la primera tarea de Manolo Abalo

AROUSA

MONICA IRAGO

El presidente del Arousa quiere cerrarla ya para comenzar con el diseño de la plantilla

10 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

No es Manolo Abalo un presidente muy disperso con los entrenadores. Raro es aquel que no estuvo al menos un par de temporadas en el siempre complicado banquillo del Arousa y el plan se mantiene inalterable con Rafa Sáez. Una vez solventado el trámite, y de manera aplastante, de la reelección, la primera tarea a la que se pondrá manos a la obra es que quien llevó las riendas del conjunto de A Lomba durante la campaña 2018-19, las mantenga en la 2019-20. «Xa coñecía o club e agora coñece moi de preto como funciona esta directiva», dice el máximo responsable del club sobre el preparador. Y considera que no debería haber ningún problema para firmar el acuerdo de manera inminente.

Ese será el primer paso y a partir de ahí comenzará a diseñarse el nuevo plantel arlequinado, trabajo en el que el entrenador será quien lleve la voz cantante. El objetivo, evidentemente, será una temporada más intentar clasificarse para poder disputar, de una vez, una fase de ascenso que se le resiste al Arousa desde hace más de 25 años. Esa es la gran espina clavada que tiene el presidente. Y la que se quiere sacar cuanto antes.

Los números van bien

Para poder juntar un equipo competitivo en una Tercera División que será, probablemente, más complicada que la de la campaña que acaba de terminar, el presupuesto se antoja imprescindible. Los números del Arousa dan y hasta es muy probable que concluya la temporada en positivo pese a la pesadilla económica y judicial que supone el caso de Pepe el Utillero. Esos ajustes económicos son los que, en opinión del presidente, restaron opciones al conjunto en la temporada 2018-19, puesto que impidieron que el equipo consiguiera hacerse un hueco entre los cuatro primeros, ya que limitaron las opciones de reforzarse en el mercado invernal, en una campaña que se complicó desde antes de empezar con la lesión de Sidibé, que era una de las piedras angulares del proyecto de Sáez. En ese sentido, Abalo subraya que la aportación económica de Ramiro Carregal fue un alivio económico imprescindible para concluir el ejercicio sin mayores problemas. Y regresa el presidente al principio, a los resultados de las elecciones del sábado, cuando subraya que una de las cosas de las que está más orgulloso de su paso por la presidencia es de que siempre es atendido cuando va a solicitar alguna ayuda. «Poden darnos máis ou menos, pero todas as portas nas que petamos, abren», asegura el directivo. Y falta hará. De momento, el máximo responsable del club asegura que él y su equipo redoblarán su esfuerzo para poder formar un primer equipo de garantías que permita a sus seguidores, al menos, soñar con poder alargar la temporada al mes de junio, aunque solamente sea una vez.