Entran de madrugada en el hospital, desmontan el cajero y se lo llevan tras abrir la puerta principal

La Voz VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

23 jul 2022 . Actualizado a las 20:48 h.

El cajero de Abanca que suele funcionar en el Hospital do Salnés amaneció ayer fuera de servicio. Y esta vez, la culpa no fue de una avería cualquiera. Esta vez, el problema fue causado por los ladrones que, durante la noche del domingo al lunes, se colaron en el vestíbulo del hospital, desmontaron el cajero y se lo llevaron entero sin que nadie se diese cuenta de lo que pasaba.

Este despacho automático de billetes está situado en el vestíbulo del centro sanitario, justo al lado del pequeño quiosco que funciona en estas dependencias. Ese espacio, muy transitado durante el día, se queda por la noche desierto: la puerta principal del centro se cierra y todos los accesos se realizan por la parte de Urxencias. Precisamente por eso, el servicio de vigilancia se traslada a esa zona y se concentra en dar servicio en ella.

Conocedores de esa realidad, y conscientes también del riesgo, los ladrones entraron en el centro sanitario alrededor de las dos y media de la madrugada. Lo hicieron a través de unas ventanas del área de administración que amanecieron forzadas. Los cacos trabajaron con sigilo, porque si el vigilante finalmente se enteró de lo ocurrido fue por una llamada de Abanca alertando de que algo había pasado con el cajero del hospital.

Y tanto que había pasado. Porque los ladrones no lo desmontaron para llevarse el dinero que contenía, sino que optaron por una solución más rotunda: se llevaron el aparato entero. Eso hace suponer que fueron varios los que entraron en el edificio sanitario. ¿Cómo lograron abandonar el centro con tan pesada carga entre manos? Según explican fuentes hospitalarias, la puerta principal del centro sanitario se cierra a las once de la noche. Pero en el interior hay un pulsador que permite abrirla para casos de emergencia. Los ladrones no tuvieron más que darle al botón adecuado.