«Vigo ha puesto el listón muy alto y cada año hay que hacer algo diferente»

Son los magos de la Navidad. Los que todos los años consiguen que Vigo se convierta en la capital de estas fiestas. Para ello trabajan, y mucho, casi durante los doce meses anteriores. Porque, aseguran, detrás de todas y cada una de las escenas que estos días adornan las calles de la ciudad pontevedresa hay mucha planificación y horas y horas de diseño y trabajo, asegura Miguel Cedeira, responsable de Eventum Pro. Un año más, esta firma ha vuelto a confiar en la cambadesa Imagina lo Imaginable, de Ana y Mara Núñez, para decorar la casita de Papá Noel, construir un poblado navideño o instalar un camello en plena calle de Príncipe en el que hay cola para hacerse una foto.

«Vigo ha puesto el listón muy alto y cada año hay que hacer algo diferente», explica Cedeira. Sorprender al público es su intención, pero no es tarea sencilla. Este año, por ejemplo, «nos hemos inspirado en que los sets fueran interactivos», relata. Así, una de las casitas cuenta con un tobogán, el tren tiene sonido y humo y hay un camello al que los más pequeños pueden subirse. «Yo creo que el secreto de nuestro éxito, además de que sea bonito, es que la gente lo puede tocar, puede interactuar», añade. Sostiene que, en cada edición, «vamos un paso más allá y el resultado de este año está siendo inimaginable», asegura. La respuesta del público está siendo muy buena. «Lo sabemos porque, a pesar de que estuvo un tiempo lluvioso, la afluencia está siendo superior a la del año pasado», insiste. De hecho, también reciben un sinfín de llamadas para saber, por ejemplo, en qué horario funciona la casita de Papá Noel. «La respuesta que nos llega es muy buena y estamos muy contentos», argumenta.

Una de las novedades de este año es el poblado navideño que se ha instalado en la plaza de la Constitución. «Son una serie de figuritas con movimiento y sonido, en una exposición de más de veinte metros», añade Ana Núñez, una de las responsables de Imagina lo Imaginable. Allí se ha recreado un pueblecito con todo lujo de detalles. Tiene hasta su estación de ferrocarril y un tren que recorre toda la exposición. La iniciativa también está triunfando. «Estamos recibiendo más de 1.500 visitas al día», insiste Núñez. «Año tras año intentamos que la decoración se extienda a más ubicaciones. Hemos colocado un cubo gigante en Gran Vía, muñecos de nieve, Papá Noeles...», dice Cedeira.

Desde Eventum Pro consideran que Vigo «está marcando tendencia, porque el retorno que está teniendo toda esta inversión es real», explica el responsable de la firma. Cuenta que hay empresas midiendo la afluencia de público y que, en base a esos resultados, se actuará en ediciones futuras. También reconoce que, cada vez, hay más ciudades que quieren seguir el ejemplo de Vigo. «Quieren seguir a Vigo, invertir en Navidad porque está obteniendo buenos resultados», relata. El problema es que trabajos como el que se ha llevado a cabo en la ciudad olívica, «requieren una planificación y una organización. Los alcaldes deben pensar qué quieren, qué se pueden permitir y, en base a eso, se crea una estrategia. Si no lo hemos pensado con antelación, no es posible», asegura. De hecho, en breve comenzarán a trabajar en la edición del año que viene. Comenzarán a pensar cómo sorprender de nuevo. «No sé qué haremos el año que viene. Vamos a tener que hacer que Papá Noel vuele», bromea. ¿O no?

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