Recaudan 150.000 euros al vender veinte coches decomisados a narcos

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

CEDIDA

El servicio de gestión de bienes incautados da una nueva vida legal a esos vehículos

26 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

En los poco más de dos años que lleva funcionando, el servicio de gestión de bienes decomisados puesto en marcha por la Fundación Galega contra o Narcotráfico y el Colexio de Procuradores de A Coruña ya ha empezado a dar sus frutos. Ayer, durante la renovación del convenio entre la Xunta y la FGCN para mantener en activo este servicio, se dieron a conocer los resultados del trabajo desempeñado. En este tiempo, explicaba Manuel Couceiro, el presidente de la Fundación, la venta de bienes decomisados a narcotraficantes ha permitido devolver a la sociedad, de una u otra forma, un total de 148.295 euros. Es el dinero obtenido tras subastar una veintena de vehículos, concretamente un camión y 19 turismos.

El servicio de gestión de bienes decomisados funciona gracias a la colaboración necesaria con el Colexio de Procuradores de A Coruña, que actúa como depositario de los bienes. Ese trabajo coordinado se ha configurado como una herramienta «diseñada para axudar ás unidades xudiciais e forzas de seguridade nunhas tarefas alleas ao seu labor e que ata a data se vían obrigadas a asumir, adicando importantes cantidades de tempo e recurso», según explica la Xunta. Es decir, permite a los juzgados desentenderse de unos bienes con los que muchas veces no sabe qué hacer, ni tiene dónde guardar.

Además de aligerar a los juzgados, el servicio evita que bienes muebles decomisados a los narcotraficantes acaben perdiendo valor mientras esperan a que alguien decida sobre ellos y su futuro. El sistema, según explica la Xunta, facilita «lograr unha óptima xestión dos bens mobles incautados, evitando a súa depreciación».

La mayoría de los bienes con los que trabaja este servicio son, sobre todo, vehículos. También material tecnológico cuya vida es muy corta. Cuando los juzgados lo consideran conveniente, contactan con la Fundación y les remiten esos bienes muebles, que son almacenados en las dependencias del Colexio de Procuradores. Cuando la autoridad judicial lo autoriza, salen a subasta a través de una plataforma web. De momento, explican desde la FGCN, han pasado por sus manos 54 bienes de distinto tipo. De ellos, se han vendido veinte vehículos -19 turismos y un camión-, alcanzando un valor medio de 7.414 euros por operación. Claro que las medias son tramposa: Solo por la venta de un Porsche se ingresaron 35.001,12 euros.

Fue un juzgado arousano el primero en utilizar el servicio de gestión de bienes incautados de la Fundación Contra o Narcotráfico. Poco a poco, las bondades de este mecanismo han ido dándose a conocer entre los juzgados de todo el país, y a estas alturas han echado mano de él jueces de Vigo, Lugo, A Coruña, Betanzos, Santiago, Cangas, Porriño. Pero también de Madrid y Cataluña, aunque suelen ser casos en los que los bienes decomisados están en Galicia.

Es evidente que, el servicio comienza a ser conocido por todo el país. Pero aún queda mucho trabajo de difusión, reconocía ayer Manuel Couceiro, el presidente de la Fundación Galega Contra o Narcotráfico. En la rueda de prensa en la que se renovó el convenio con la Xunta, valorado en 15.000 euros, explicó que este servicio tiene muchas ventajas tanto para los juzgados, que se ven aliviados de cargas, como para la sociedad que no solo recupera parte del dinero de la droga, sino que recibe un mensaje ejemplarizante.

Un barco, un camión y una flotilla de turismos, los próximos en salir a subasta

Explican desde la Fundación Galega Contra o Narcotráfico que próximamente saldrá a subasta una nueva remesa de bienes muebles decomisados. En este caso, argumenta Fernando Alonso, el gerente de la FGCN, se trata de cuatro turismos, un camión y un barco. Aún quedarían pendientes de que se decida su futuro un total de 16 vehículos.

Porque la venta no es el único destino que pueden tener los bienes decomisados. Según los datos ofrecidos ayer, una veintena de colectivos sociales han solicitado que algunos de esos vehículos incautados les sean entregados, a fin de poder utilizarlos en los programas que desarrollan en los ámbitos más variopintos. Probablemente, a pocos destinos mejores que ese puedan aspirar los vehículos que en su día estuvieron relacionados, de una u otra forma, con el mundo del narcotráfico.