Capturan accidentalmente con un raño un pez luna en Carril, a solo unos metros de la orilla

Tremenda sorpresa la que se llevó Rosana Gago cuando ayer estaba trabajando en su vivero de Carril. «Estaba el agua un poco revuelta y no lo veía bien. Pensaba que era una ouxa o una solla y cuando lo cogí con el raño vi lo que era», recuerda. Y era nada menos que un pez luna, capturado a solo unos metros de la orilla, puesto que el agua cubría poco más de la cintura a Rosana.

Al principio iba con precaución porque el aguijón de las ouxas ya le dio algún susto, pero, tan pronto como sacó el raño del agua, del temor pasó a la incredulidad. Es la primera vez que le pasaba algo semejante y rápidamente pensó que convenía inmortalizar el momento con una fotografía para que nadie dudara de su hallazgo. Así lo hizo justo antes de devolverlo al mar porque el animal estaba con vida.

A pesar de que el pez luna no es una especie que tenga su hábitat en las rías gallegas, lo cierto es que cada vez son más frecuentes los encuentros con este tipo de animales por toda la costa. Este verano constan al menos un par de varamientos. El primero sucedió en Boiro a finales del mes de mayo, cuando Protección Civil ayudó a que un enorme ejemplar de dos metros se trasladara a aguas abiertas. En agosto, un grupo de bañistas devolvieron ayer al mar a otro ejemplar que varó en la playa de A Ladeira, en Corrubedo. Lo introdujeron en una piragua para llevarlo aguas adentro cuanto antes y así poder salvarle la vida

El pez luna que se encontró Rosana, que tiene su vivero en la zona de la punta Portugalete, enfrente del restaurante Loxe Mareiro, tenía un buen tamaño, aunque no tan grande como los congéneres anteriormente citados. El pez puede superar con facilidad los dos metros de longitud.

En cualquier caso, y para evitar posibles tentaciones por si se produce algún encuentro más, conviene advertir que la venta de su carne está prohibida en la Unión Europea.

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