El Cortegada sucumbe ante la coralidad del vigente campeón

AROUSA

La superioridad de la pareja interior viguesa y la falta de claridad del ataque local permitieron al Celta manejar el marcador

07 oct 2018 . Actualizado a las 00:20 h.

La Liga Femenina 2 ha ofrecido la primera función de su temporada 2018/19 en el teatro de Fontecarmoa, y lo cierto es que el espectáculo no defraudó, más allá del drama que para la afición y el equipo local supuso sufrir su primera derrota del curso. Claro que caer contra el vigente campeón de Liga y firme aspirante a revalidar título y conseguir, esta vez sí, el regreso a la Liga Femenina, a buen seguro ayuda a mitigar el efecto del primer gancho en la cara que la A.D. Cortegada recibió del Celta Zorka en forma de 59-73 final.

Nada tuvieron que ver ni en el fondo ni en la forma los pinchazos vilagarcianos con el Celta de dos semanas atrás en Copa (81-55) y el encajado esta vez. Porque si en la fase de clasificación para la final a cuatro copera el Cortegada jugó en cuadro, y a que no se le lesionase nadie, en esta ocasión las de Rubén Domínguez exprimieron su corta plantilla en pos de un triunfo que el Celta supo atar bien, como demuestra la única ventaja local en todo el partido, en el 4-3 del minuto 1,59.

El juego coral del conjunto de Cristina Cantero decantó la balanza, sostenido sobre la superioridad manifiesta de su pareja de interiores titular, Itziar Germán y una Hildur Bjorgkartansdottir que acabó el encuentro con un doble-doble, 18 puntos y 10 rebotes. Juntas anularon a sus pares rivales en los quintetos titulares, Izabella Sangalli y Hannah Shaw, con la primera anotando su primera canasta a 2,40 para el descanso, y la cinco británica acabando el partido con cero puntos en su casillero particular. Con este lastre, y una circulación sin balón de lo más lenta, el Cortegada se encontró con un 8-21, con el Celta anotando con facilidad bien manejado, una vez más, por su base Anne Senosiain y, sobre todo, con el plus de un juego coral en ataque que no le hacía depender de ninguna jugadora. Justo al contrario que su anfitrión.

Solo la inspiración de Salomé García, con 11 de los 15 puntos de su equipo en el primer cuarto, permitió amarrar al Celta en corto (15-21), ayudada por la mejoría en la fluidez ofensiva del Cortegada con la entrada en pista de Andrea Ríos por Shaw en el minuto 6.

Un triple de Míriam en la primera acción del segundo cuarto acercó a las de Rubén Domínguez a 3. Ese fue el techo de cristal que no lograron romper el resto del partido. Con Shaw de nuevo en pista el Celta volvió a despegarse, yéndose 29-39 al descanso.

Apagada la luz de Salomé, y con dos jugadoras clave como Sara Gómez y Cristina Loureiro en off, emergió entonces la figura de Izabella Sangalli. La ala-pívot, siempre activa, se multiplicó en toda la pista, y con sus puntos y rebotes -17 y 15 a la conclusión del choque-, y la incidencia de una Andrea Ríos en el juego, bien para anotar, bien para abrirlo para sus compañeras, el Cortegada soñó con la remontada al entrar en el último acto 49-56.

Pero otro apagón vilagarciano -Sangalli anotó la primera canasta local a 4,29 del final-, unido a la aparición de Lacorzana, con 9 puntos, dieron al traste con el empeño del Cortegada.

FICHA:

A.D. CORTEGADA (59): Sara Gómez (2), Salomé García (18), Cristina Loureiro (9), Izabella Sangalli (17) y Hannah Shaw -quinteto titular-; Andrea Ríos (10) y Míriam García (3)

CELTA ZORKA (73): Anne Senosiain (15), Tamara Montero (9), Adrianne Motley (9), Itziar Germán (4) y Hildur Bjorgkartansdottir (18) -quinteto titular-; Elo Edeferioka (2), Paula Ahuja (2) y Ainhoa Lacorzana (14)

Parciales (y marcador) cada cuarto: 15-21, 14-18 (29-39 al descanso); 20-17 (49-56) y 10-17 (59-73, resultado final).

Árbitros y personales: Jaime Álvarez y Elio Clavera. Señalaron 14 faltas a la A.D. Cortegada, y otras tantas al Celta Zorka. Sin eliminadas.