El expolicía acusado de trapichear en clubes pide la nulidad de las pruebas

Alfredo López Penide
L. Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

AROUSA

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05 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si el pasado junio rechazó llegar a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía de Pontevedra, ayer instó a que la Audiencia Provincial anulase la pruebas. La defensa de Lucas Rodríguez Pazos, el expolicía nacional acusado de distribuir cocaína entre clubes de alterne y de avisar de redadas a sus titulares, sostuvo su petición de nulidad en que, supuestamente, existió una «ausencia total de control judicial sobre las intervenciones».

De este modo, aludió a que se habrían pinchado cerca de medio centenar de teléfonos, donde, según recoge Europa Press, «el control fue inexistente». Añadió que con esta forma de actuar «se traspasaron todos los límites legales y se vulneraron los derechos fundamentales» de su cliente.

Estas afirmaciones fueron descartadas de plana por parte de la fiscal, quien mantuvo que, por un lado, existió un «escrupuloso control» y, por otro, que estaba «justificada» la intervención de las comunicaciones.

La Audiencia decidió suspender la vista oral para estudiar las cuestiones previas planteadas, de tal modo que el juicio se retomará el próximo 27 de noviembre. El fiscal solicita dos años y nueve meses por un delito contra la salud pública, 21.000 euros de multa, así como algo más de cinco mil euros de multa, y año y medio de inhabilitación por revelación de información reservada,