El 6+1 del Rosario de Vilaxoán

Rosa Estévez
r. estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

Desde el País Vasco, Loli Couso «A Coca», encabeza al grupo de mujeres que llevan las riendas de las fiestas vilaxoanesas

21 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Loli Couso, A Coca, es una mujer vehemente. Se nota en cuanto abre la boca, aunque sea a 800 kilómetros de distancia. Desde Guipúzcoa, su tierra de acogida, esta vilaxoanesa de raza participa de forma activa en la organización de las fiestas de su pueblo. Con un teléfono y con Internet, asegura «todo se fai». Y con esa vehemencia suya que logra desatascar problemas en Portos, en el Concello, y donde haga falta.

A Coca, ya lo hemos dicho, derrocha carácter y energía. Y sabe trabajar en equipo con las seis mujeres que, pegadas al suelo vilaxoanés, hacen el duro trabajo de llamar a puertas y visitar empresas para conseguir los fondos necesarios para sacar adelante las fiestas. Es la primera vez que este grupo de seis más uno lleva las riendas de los festejos. Las cogieron porque los anteriores integrantes de la comisión se habían rendido. «E sabíamos que se as festas deixaban de facerse un ano, xa non se facían máis», remarca A Coca. Así que, aunque con la coordinadora el grupo a cientos de kilómetros, estas mujeres tan trabajadoras como animosas, se pusieron manos a la obra para darle al Carmen y al Rosario las celebraciones que se merecen. «Son as festas grandes de Vilaxoán, da xente de Vilaxoán», dice A Coca. Sus argumentos son difíciles de desmontar: las imágenes de las dos vírgenes son muy antiguas, y además fueron pagadas por los marineros de la localidad, a los que nunca les sobró el dinero, pero sí la devoción. Así que Loli Couso y sus compañeras de fatigas decidieron intentarlo. La primera prueba, los festejos del Carmen, fue superada con holgura. A Coca, que estaba de vuelta en casa por vacaciones, apenas pudo disfrutarlas: tanto ella como sus compañeras estaban al quite de todo lo que ocurría, pendientes de que nada fallase. Ahora, el verso libre del equipo organizador está en Guipúzcoa, atando cabos a distancia y contando los días para volver a Vilaxoán, a celebrar el Rosario.

Empezaron a preparar esta celebración en cuanto se apagaron los ecos de la última verbena del Carmen. Y siguen a ello, que unas fiestas no se preparan en dos días. «Estas cousas dan moitísimo traballo, porque hai que atender a unha chea de cuestións». Desde asegurarse que la megafonía funcione a la hora del pregón, hasta cerciorarse de que hay sillas para aquellos eventos en los que el público estará sentado, hasta tramitar los permisos con las distintas administraciones... «A verdade é que acabas toleando», dice A Coca. Todo sea por Vilaxoán.