Los vilagarcianos juegan con la ausencia de Javi Pazos, pichichi de la categoría, que debe cumplir un partido de sanción
17 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El Arousa podría dormir hoy instalado en la tercera posición de la clasificación. Una victoria en el encuentro que disputa esta tarde (17.00) en el terreno de juego del Barbadás le permitiría dar otro salto en la tabla y, de paso, añadirle una dosis de presión a los conjuntos que, como el vilagarciano, están peleando por hacerse un hueco entre los cuatro primeros. En realidad, la pelea es por la tercera y la cuarta plaza porque el Compostela y el Bergantiños ya parecen fuera del alcance de sus perseguidores. Y en esa lucha, además del cuadro arlequinado, están el Barco, Vilalbés, Alondras, Somozas y hasta el Silva, si estiramos un poco la goma.
Jorge Otero decidía la lista de convocados al concluir el entrenamiento de ayer, pero el técnico ya tenía confirmada la baja del pichichi de la categoría. Javi Pazos fue expulsado en el encuentro del pasado domingo en A Lomba contra el Boiro y, afortunadamente, el vídeo que aportó el club vilagarciano dejó el castigo en solamente un encuentro de sanción, porque había un notable riesgo de que fuera más amplio.
Las dudas
Al margen de la ausencia de su máximo realizador, el Arousa tenía varias dudas a la hora de diseñar la convocatoria. Manu Justo, que ya no pudo disputar el encuentro contra el Boiro, comenzó a entrenarse a mediados de esta semana, pero su presencia en el equipo genera dudas debido a que prácticamente no ha podido completar más que un par de sesiones de trabajo.
El otro futbolista del Arousa cuya presencia corre peligro es Marcos, que ha tenido un problema bucal que ha necesitado de algún punto de sutura. El resto de la plantilla, salvo circunstancia negativa de última hora, estará a disposición de Jorge Otero para el duelo de esta tarde.
El Arousa tiene el caramelo de una hipotética clasificación para la fase de ascenso muchos años después, pero el Barbadás también llega al encuentro con la presión de conseguir un buen resultado, aunque, en su caso, con una presión negativa porque su problema es que está en plena pelea por evitar el descenso de categoría.
El conjunto ourensano está en la antepenúltima posición de la clasificación y con la seria amenaza de que los descensos en cadena que llegarán desde la 2.ª B conviertan su permanencia en algo muy complicado.