¿Cómo duermen los arousanos?

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

AROUSA

PILI PROL

Al menos un 10 % de la población sufre algún trastorno de sueño crónico y grave. El Chop cuenta con una unidad específica que da cobertura a unos 2.500 pacientes

16 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Este 16 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño. Una fecha que pone el acento en la importancia que tiene para la salud destinar tiempo suficiente al sueño y a adecuar los horarios que dedicamos a dormir. El lema de este 2018 es Únete al mundo del sueño, conserva tus ritmos para disfrutar de la vida. Según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), al menos un 10 % de la población española sufre algún trastorno de sueño crónico y grave. Pero es que además se estima que el 90 % de los pacientes con apnea del sueño o con el síndrome de piernas inquietas y entre el 60 y el 80 % de los que sufren narcolepsia están sin diagnosticar. A ello se suma que menos de un tercio de las personas con problemas de sueño buscan ayuda profesional.

Los trastornos del sueño más frecuentes son el insomnio, el síndrome de las piernas inquietas y el síndrome de apneas-hipopneas del sueño. Estos tres son los predominantes, aunque también existen otros como la narcolepsia o las parasomnias no REM y el trastorno de conducta de fase REM. Los neurólogos inciden en que dormir es fundamental para la salud física y mental, pero que el sueño debe ser «de calidad» y con una duración adecuada. Esa duración varía con la edad, pero también está relacionada con factores genéticos y personales. En el caso de los adultos, se recomiendan entre 7 y 9 horas. La Sociedad Española de Neurología alude a que los problemas de sueño son más frecuentes en mujeres y en personas mayores, aunque también aparecen en edades pediátricas.

Alteraciones respiratorias

El Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (Chop) cuenta con una unidad del sueño, que dirige el doctor Adolfo Baloira. Esta unidad realiza una polisomnografía diaria y da cobertura a unos 2.500 pacientes del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, que están afectados principalmente por alteraciones respiratorias y por la apnea del sueño.

Esta unidad específica del Chop incorporó en abril del 2017 un nuevo equipo que permite el diagnóstico de enfermedades respiratorias del sueño y alteraciones neurológicas. Según indicó entonces el Chop, el polisomnógrafo del Hospital Montecelo incluye más de treinta sensores para medir la calidad del sueño, los movimientos respiratorios, la forma de roncar del paciente y la saturación de oxígeno y de dióxido de carbono en la sangre, además del movimiento de los párpados y de las piernas.

Ese equipo fue uno de los primeros que se instaló a nivel nacional y una de sus ventajas es que los especialistas de la unidad pueden visualizar la evolución del sueño a distancia, por ejemplo, desde la consulta, y modificar los parámetros. En la actualidad la insuficiencia respiratoria crónica se trata con ventiladores domiciliarios.

«El sueño es reparador, pero es mucho más. Si uno no sueña puede acabar teniendo trastornos psiquiátricos»

Adolfo Baloira (Pontevedra, 1966) está al frente de la unidad de patología respiratoria del sueño del Chop desde su creación en el año 2000. Está dentro del servicio de Neumología, aunque trata también a pacientes de patologías no estrictamente respiratorias porque dispone de un laboratorio de sueño para hacer estudios nocturnos.

-¿Le damos al sueño la importancia que tiene?

-Es fundamental dormir. Aproximadamente un tercio de nuestra vida la pasamos durmiendo y el sueño es reparador, pero es mucho más. Si uno no tiene sueños, lo que es soñar, las fases famosas REM, puede acabar teniendo trastornos psiquiátricos. No es solo descansar, tiene una serie de funciones profundas más que el descanso. Si a un individuo no se le deja dormir después de varios días puede incluso morirse. Es fundamental para nuestro funcionamiento. Y luego tiene otra parte importante, como es reparador de todo el cansancio, de la actividad de nuestro cerebro durante el día, si uno no duerme bien al día siguiente se encuentra mal y creo que todos lo hemos sufrido más de una vez. La calidad de vida durante el día está muy relacionada con la calidad de vida durante la noche. Las personas que están estresadas, ansiosas o con depresión, uno de los trastornos más importantes que tienen es que no son capaces de dormir. Y cuando les damos algo para dormir suelen mejorar bastante esos síntomas.

-¿Cuándo hay que preocuparse?

-Aunque la mayor parte de la gente suele dormir entre seis y ocho horas, el rango de normalidad es de cuatro a diez. Cuando uno tiene sueño durante el día a pesar de dormir lo razonable es cuando hay que empezar a preocuparse. Si una persona duerme las ocho horas y cree que bien, pero se levanta cansada y sigue con ganas de dormir durante el día, eso es patológico. Lo mismo pasa si no es capaz de dormir más de dos o tres. Lo primero es hipersomnia, que es lo que más vemos, y lo segundo, insomnio.