El Comité de Competición castiga con medio año de inhabilitación y 14 partidos más al entrenador de un equipo infantil que propinó un cabezazo a un colegiado
25 ene 2018 . Actualizado a las 13:39 h.Castigo ejemplarizante el que el Comité de Competición y Disciplina encargado de hacer velar por el cumplimiento del reglamento en el Grupo 61 de Pontevedra de la Segunda Infantil ha aplicado al entrenador del equipo B del C.D. Ribadumia, el caldense José Luis Rodríguez Lafuente. Expulsado en el minuto 60 del encuentro en el campo del Unión Grove por invadir el campo y proferir insultos contra el colegiado del mismo, este último recogía en su acta haber recibido un cabezazo de Rodríguez Lafuente en el túnel de vestuarios terminado el partido. Una acción que le costará al agresor nueve meses y medio fuera de los terrenos de juego.
Y es que Competición y Disciplina tuvo en consideración el agravante de reincidencia, al constatar que como jugador de la Liga de Fútbol Veterano de la Real Federación Galega de Fútbol José Luis Rodríguez había sido sancionado el mes pasado con siete encuentros de suspensión en calidad de jugador del Chispa, también por agresión verbal o física a un colegiado. En el caso del partido de fútbol base del pasado domingo, Competición lo sanciona con «seis meses de inhabilitación por agredir al árbitro principal [...] en acción única y no originando ninguna dañosa, una vez finalizado el partido, con agravante de reincidencia», con «doce partidos de suspensión por amenazar o coaccionar al árbitro principal [...] una vez finalizado el partido, con agravante de reincidencia»; y con «dos partidos de suspensión por dirigirse a los árbitros [...] en términos o con actitudes de menosprecio o de desconsideración, o dirigir amenazas a estos cuando no se revele la intención de llevarlas a cabo, siempre que la acción no constituya falta más grave». Castigo que lleva aparejada una multa de 266 euros, además de otros 40 al C.D. Ribadumia «por alteración del orden del encuentro de carácter leve».
La Real Federación Galega de Fútbol emitió ayer un comunicado en el que muestra su «condena a todo tipo de violencia que se produza nun campo de fútbol, e por iso se congratula da decisión adoptada polo Comité de Competición». La RFEG entiende que «son accións illadas, pero non por iso menos graves, e solicita a colaboración de todos» los estamentos del fútbol «para camiñar cara a un fútbol sen violencia».
En dichos estamentos incluye a los padres de los futbolistas, que en este caso han trasladado a la directiva de su club, el Ribadumia, su disconformidad con el comunicado en el que pedía perdón por lo sucedido, y adelantaba que acataría sin recurso el fallo de Competición fuese el que fuese.