El cambio de fechas de la Volta a Portugal le permite ganar una semana de concentración en altura, entorno en el que esta temporada acumulará más días de trabajo que de competición previa a la gran ronda lusa
15 mar 2017 . Actualizado a las 13:04 h.Gustavo César Veloso arrancaba el pasado 1 de febrero un largo camino de seis meses cuya única finalidad y la de su equipo, el W52-F.C. Porto, es la de rodar la maquinaria del corredor vilagarciano hasta llevarla a su punto justo de afinación en la línea de salida de la Volta a Portugal. Conquistar el que sería su tercer triunfo en la general de la Grandíssima vuelve a ser el reto individual y colectivo del profesional de Bamio. Un reto para el que, mes y medio después de sus primeros kilómetros de competición en el 2017, Veloso tiene ya su particular rutómetro.
Completada su participación en la Volta a Valencia (1 a 5 de febrero) y la Volta ao Alentejo (22 al 26 del mismo mes), el arousano se sentó con su director deportivo, Nuno Ribeiro, para consensuar el calendario de carreras de Gustavo César previo a la Volta a Portugal. Una elección en la que, explicaba ayer el bicampeón de la Grandíssima, «tivemos en conta tanto a miña preparación como as carreiras que son máis importantes para o equipo» buscando el mejor encaje entre una y otras. Y el resultado han sido 35 días de competición en el calendario del vilagarciano.
A las diez jornadas ya cubiertas en febrero, Veloso sumará únicamente una este mes. En la Classica de Primavera calendada para este domingo, que llevará al jefe de filas del W52-F.C. Porto hasta Povoa de Varzim.
La Vuelta a La Rioja y el Gran Premio Miguel Indurain abrirán los días 1 y 2 el calendario de abril de Veloso, que incluye la Volta á Bairrada (22 y 23), y la Vuelta a Asturias, ya medio camino entre abril (29 y 30) y mayo (1).
En este último mes tocará rodarse en las vueltas a Castilla-León, los días 19, 20 y 21, y la Jornal de Noticias, 24 al 28, encadenando, ya en junio, una tercera semana de competición en la Volta a Beiras, del 1 al 4.
Tocará entonces la primera de las dos concentraciones en altura que tan excelentes réditos le han venido dando a César Veloso en los últimos años. De 23 días en Navacerrada, del 8 al 30 de junio, para disputar después la Volta a Torres Vedras del 5 al 9 de julio en la última piedra de toque previa a la Volta a Portugal. Y de 16 jornadas más, del 10 al 25 de julio, en principio en Manzaneda. Una concentración esta última de una semana más de duración respecto a temporadas anteriores, al desplazarse en su próxima edición la Volta a Portugal siete días adelante en el calendario, con inicio el 4 de agosto y final el día 15 del mismo mes.
Veloso solo ha dejado un elemento sin atar. Su presencia o no en el Campeonato de España, pendiente de saber si se celebrará cerca de Navacerrada para compatibilizarlo con su concentración.