El Sergas debe indemnizar con 60.000 euros a una mujer a la que una operación dejó incapacitada

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

En 2006 fue sometida a una operación en la mano izquierda para la que no había firmado su consentimiento

09 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando Eulalia Valladares, mariscadora y trabajadora de una depuradora, empezó a perder fuerza en las manos, no se imaginaba que su vida iba a cambiar radicalmente. Fue a su médico de cabecera y, de él, fue derivada a un especialista del Hospital do Salnés. A la mujer se le diagnosticaron parestesias y se le aplicó un tratamiento conservador. Pero, como quiera que este no daba resultado, el traumatólogo decidió aprovechar que iba a ser sometida a una intervención en su mano izquierda -tenía una tumoración en varios dedos- para intervenir también sobre el túnel carpiano. Aquella primera operación, de la que no consta autorización firmada de la paciente, no hizo más que empeorar su situación. Eulalia tuvo que ser operada hasta en cuatro ocasiones más, y su mano ha quedado completamente deformada.

Como consecuencia de todo ello, esta mujer se vio, primero, incapacitada para utilizar ese miembro. Eso acabó provocándole otra serie de problemas que llevaron a que, en el año 2010, se le reconociese una incapacidad total. Fue entonces cuando intentó que el Sergas la indemnizase. Recibió un no por respuesta «y muchas burlas». Así que llevó el caso a los tribunales, asesorada por el despacho de Cipriano Castreje. La sentencia se acaba de conocer: el Sergas deberá indemnizar con 60.000 euros a esta vecina de Padrenda, cuya vida ha cambiado por completo. Ella, por lo pronto, reclamará para que se eleve esa cuantía.