El ladrón de coches vuelve a actuar y desvalija al menos otros diez en la ciudad

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Actuó en una noche en cuatro calles en las que destrozó los vehículos, pero el objeto de más valor que se llevó fue un móvil

07 oct 2014 . Actualizado a las 04:58 h.

En lo que va de año, van seis jornadas de intenso trabajo y una treintena de coches destrozados, eso siempre que se demuestre que el individuo que robó en la noche del domingo en al menos diez vehículos más sea el de siempre, un vecino de Vilagarcía de 38 años que es toxicómano y que entra y sale de comisaría para volver a actuar el mismo día o, como muy tarde, unos días después. Su última fechoría data del 17 de septiembre, y anteayer volvió a actuar.

La Policía Nacional recibió un aviso de la avenida de A Mariña, donde al parecer había una persona que, tras romper la ventanilla de un turismo, buscaba algo en su interior. Unas horas después, en la comisaría de O Cavadelo se contabilizaron diez denuncias por casos similares, y no se descartaba que pudiesen interponerse más. Todas ellas similares, y responden al patrón habitual del ratero que más temen los propietarios de los coches que quedan por la noche a la intemperie. El ladrón rompe la ventanilla y se lleva lo que encuentre dentro. En otras ocasiones tuvo más suerte, pero este fin de semana, el objeto de más valor que pudo conseguir fue un teléfono móvil y un manos libres. A mayores, se fue con ropa de trabajo y documentación. Como siempre, son mayores los daños que provoca en los vehículos que el valor de los objetos que se lleva.

En ocasiones anteriores actuó en Marxión, en A Escardia, en Rodrigo de Mendoza y, en el último caso, en O Piñeiriño. Casi siempre en zonas delimitadas y con gran rapidez, para no dar tiempo a reaccionar al vecindario. Esta vez el radio de actuación fue mayor, porque al menos, que se tenga constancia por las denuncias, los destrozos los hizo en vehículos aparcados en la avenida de A Mariña y calles del entorno de Os Duráns, en Eduardo Pondal, Otero Pedrayo y Aquilino Iglesia Alvariño.

Las veces que el sospechoso pudo ser localizado y detenido, quedó en libertad tras declarar en los juzgados, por lo que acumula en su haber un amplio historial de robos de los que deberá dar cuenta cuando se celebre algún juicio.

Otro ratero que sí acabó entre rejas

El caso del ratero de coches está acabando con la paciencia de los ciudadanos, pero al tratarse de pequeños robos, el presunto autor no ingresa en prisión. Aunque en otros casos similares, el juez sí decretó cárcel. Ocurrió no hace mucho en Pontevedra. La Policía alegó la alarma social y que entre las víctimas había menores, un agravante que dio sus frutos.