El primer fin de semana de recogida se frena por las precipitaciones
29 sep 2013 . Actualizado a las 06:59 h.Si las lluvias no hubieran hecho su aparición, Rías Baixas se encontraría ahora mismo inmersa en el proceso de vendimia. Este fin de semana estaba destinado a ser el primero en el que los trabajos cobrasen intensidad. Pero no ha podido ser. El agua ha obligado a aplazar la recogida, por lo menos, durante los próximos cuatro días.
Cualquier otro año a estas alturas, Rías Baixas tendría ya en las bodegas buena parte de su producción. Pero en esta ocasión no ha podido ser. La cosecha viene con retraso, pues la brotación se produjo más tarde de lo que es habitual. Y ahora que todo estaba previsto para iniciar la vendimia, han llegado las lluvias.
Todo a punto
En la mayoría de las bodegas aprovecharon las jornadas de la semana pasada en las que lució el sol para recoger la uva necesaria para elaborar los pies de cuba. Ahora, solo están a la espera de que llegue el buen tiempo. «Agora polo menos xa vemos que hai algo de luz», explica Miguel Tubío, de Martín Códax. En un principio, parecía que la borrasca iba a quedarse en la comarca durante toda la próxima semana. Afortunadamente, las previsiones han cambiado y el sector confía en que la recogida pueda retomarse a mediados de la semana próxima, cuando el sol luzca de nuevo. Pero el sector sabe que, por lo menos, serán cuatro los días que tenga que permanecer parado.
En cuanto el tiempo cambie, las bodegas pondrán a funcionar toda la maquinaria de forma inmediata. La uva ha llegado ya a su grado de maduración adecuado y está preparada para ser vendimiada. «Estamos esperando a que chegue unha semana boa a aí darlle caña», añade Tubío. Y es que la inestabilidad es una característica de las condiciones meteorológicas de esta época. Los técnicos viven pendientes de las previsiones. Estas varían sin cesar y de un minuto para otro, de ahí que haya que «convivir coa choiva», sentencia Tubío.
Los primeros trabajos
Aunque en algunas bodegas ya han comenzado con la vendimia, en otras todavía están a la espera. «Comenzaremos alrededor del 4 de octubre, en función del tiempo», explica Marta Castro, enóloga de Lagar de Pintos. También aquí la lluvia ha hecho su aparición justo cuando estaba previsto iniciar la recogida de la futura cosecha.