El conflicto de Cuca sigue activo en el Parlamento

maría santalla VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

La maquinaria de Cuca salió en varios camiones.
La maquinaria de Cuca salió en varios camiones. martina miser< / span>

El PSOE y AGE acusan a la Xunta de incumplir el acuerdo para mantener la histórica conservera en Vilaxoán

29 may 2013 . Actualizado a las 06:55 h.

El conflicto de la conservera Cuca en Vilaxoán volvió ayer al primer plano en el Parlamento de Galicia. El asunto volvió a tratarse en O Hórreo de la mano de una pregunta planteada por el Partido Socialista, que se interesaba por las gestiones que había realizado la Xunta para garantizar la continuidad de la factoría y la conservación del empleo en la factoría de Cuca después del acuerdo unánime que los grupos adoptaron, hace unas semanas, en ese sentido.

A la vista de los últimos acontecimientos, la parlamentaria socialista Patricia Vilán acusó a la Xunta de hacer oídos sordos al mandato parlamentario para garantizar los puestos de trabajo de la conservera de Vilaxoán, evitando su traslado a O Grove. La diputada acusa al gobierno gallego de permitir el desplazamiento de una planta que contaba con un cuadro de personal fijo de 88 trabajadores y alrededor de 150 eventuales, y critica la «pasividade» de los gobiernos en este tema, incluido el Concello, que «estivo ausente en todos e cada un dos actos organizados polas traballadoras», y por supuesto, la Xunta, que «gardou silencio».

Vilán insiste a la hora de lamentar la inacción de la Xunta en este conflicto, sobre todo cuando, a mediados del mes de abril, «trinta axentes da Policía Nacional ampararon, á unha da madrugada, o desmantelamento da maquinaria que era gardada por dez traballadoras».

Al juzgado

Tampoco hizo nada el Gobierno gallego, aseguró la diputada socialista, «para axudar ás vinte traballadoras que a finais de abril acudiron ao xulgado de Pontevedra» para comparecer en el juicio sobre el ERE que afectó a 69 operarias.

A principios de mayo, expuso Patricia Vilán, la conselleira de Mar confirmaba que la empresa propietaria de la conservera, la vasca Garavilla, había solicitado permiso para el traslado del material, pero que todavía no había sido concedido. Pese a ello, se retiraron máquinas de la planta de Vilaxoán «coa mesma represión sobre as traballadoras e mantendo aos veciños nas súas casas».

También Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) acusó a la conselleira Rosa Quintana de «mentir» en el Parlamento al asegurar que la Xunta velaría por el mantenimiento de los puestos de trabajo. No fue, dice además este grupo, la única mentira, pues «tamén firmou que a maquinaria subvencionada da factoría non podía moverse do lugar» y la realidad fue bien distinta, destaca AGE.