Cuca se promociona en Madrid Fusión mientras la plantilla lucha contra el cierre de la factoría de Vilaxoán
AROUSA
Garavilla organizó en el salón gastronómico una demostración en la que dio a conocer su nueva gama de productos
08 feb 2013 . Actualizado a las 06:57 h.Ayer se cumplía un mes desde que las mujeres de Cuca comenzaban a hacer guardia frente a la fábrica de Vilaxoán para evitar su cierre una vez que la empresa Garavilla les comunicó su intención de clausurar la planta vilagarciana y de impulsar un ERE temporal hasta que pudiese efectuar el traslado del personal a O Grove. Curiosamente, en pleno conflicto laboral, el grupo conservero acudió a Madrid Fusión a promocionar la marca Cuca, precisamente la que hasta el momento se fabricaba en la factoría de Vilaxoán.
En el que es uno de los salones gastronómicos más importantes, Garavilla organizó una demostración culinaria con el fin de dar a conocer su nueva gama de productos. Fue el prestigioso cocinero Pepe Solla el encargado de cocinar deliciosos platos con la conserva de Cuca. No fue esta la primera colaboración de Solla con Cuca, pues ya con anterioridad elaboró algún recetario para la conservera, de manera prácticamente desinteresada. En esta ocasión, el chef, que cuenta con una estrella Michelín, preparó unas exquisitas recetas en las que incorporó la gama de productos Reserva de Familia, tal como destaca la compañía Garavilla en su página web.
La demostración comenzó con una pequeña charla de introducción y una posterior demostración de cómo preparar las recetas, elaboradas, en su mayoría, a partir de la nueva línea de productos Reserva de Familia, compuesta por bonito y ventresca de bonito del norte en aceite de oliva, mejillones en escabeche y sardinillas en aceite de oliva. Para preparar estos productos, el cocinero se basó en sus viajes por diferentes partes del mundo. Entre otras cosas, en Madrid Fusión pudieron degustarse berberechos en cebiche de pomelo, canelón de nabo, navaja y jugo de verduras, zamburiñas en caldeirada de curri, o mejillones escabechados con guacamole. Todos ellos con el sello de Cuca.
Todos ellos, pues, elaborados por las manos de las mujeres que ahora pelean contra el desmantelamiento de la fábrica de Vilaxoán y que hacen guardia las 24 horas para tratar de impedir que se retire la maquinaria. Esta retirada parece, por cierto, que no tardará mucho en llegar, aunque la jornada de ayer transcurrió con tranquilidad. La plantilla continúa recogiendo firmas de apoyo para tratar de frenar el cierre.
Las mujeres siguen de guardia para evitar un traslado que creen inminente