El colectivo impulsa grupos de base «abertos» al margen ya del BNG
29 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Las consecuencias lógicas de la escisión protagonizada por Encontro Irmandiño en el seno del BNG comienzan a cobrar forma en O Salnés. Los irmandiños, a los que en la comarca dan voz Francisco Trigo, Ramón Mouriño y Xosé Manuel Domínguez, trabajan en la creación de los denominados grupos de base para o novo proxecto común en diferentes lugares de Galicia, al margen ya de las agrupaciones comarcales del Bloque.
Estos grupos, explica Mouriño, son la base de la estructura que EI busca articular en un intento por refundar el nacionalismo gallego independientemente del BNG. «Trátase por iso dun proxecto aberto, non limitado a militantes ou exmilitantes nacionalistas, senón á sociedade e a quen queira participar», apunta el ex portavoz municipal del Bloque en Ribadumia. Quien, por cierto, solicitará su baja en el frente esta misma semana. Junto a él es probable que confirmen su marcha el grovense Domínguez y la vilagarciana Bernarda Rubianes. Los tres formaban parte del anterior consello comarcal, al igual que Francisco Trigo -que la semana pasada abandonaba la organización nacionalista tras treinta años de militancia- y Mari Carme Martínez, de Meis, miembros también del colectivo irmandiño.
Este nuevo proyecto, añade Ramón Mouriño, debe asentarse sobre dos ejes: el nacionalismo y la izquierda política. A partir de aí, «o obxectivo é sumar e construír». En su punto de mira, los próximos comicios autonómicos siempre que medien el tiempo y los recursos necesarios para articular una estructura electoral eficiente.
A la espera de Máis Galiza
Aunque Encontro Irmandiño y Máis Galiza son corrientes independientes, su alianza estratégica en las dos últimas asambleas nacionales del BNG hace inevitable que todas las miradas se dirijan a la asamblea que el colectivo que lidera Carlos Aymerich, con fuerte implantación en municipios arousanos como Catoira, celebrará el 11 de marzo. Tanto es así que la definición de los grupos esbozados por EI tendrá que esperar, probablemente, a que sus virtuales compañeros de viaje tomen una decisión.