Los pazos que pueblan O Salnés son uno de los atractivos turísticos de la comarca
20 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Ni el tamaño de la casa, ni la piedra, ni la finca hacen al pazo. Para alcanzar esa categoría de pequeños palacios rurales, las viviendas solariegas gallegas deben cumplir una serie de requisitos. «Capilla, hórreo, palomar y ciprés, pazo es», dice la tradición. En la comarca de O Salnés abundan las construcciones que se ciñen a esta descripción: algo más de una veintena aparecen censadas como recursos turísticos por el Patronato Rías Baixas.
Por el momento, sólo Vilagarcía y Sanxenxo se han decidido a aprovechar el potencial de estos vetustos edificios. En la capital arousana se realizan, durante los meses de verano, visitas guiadas que transcurren por los pazos de Vista Alegre, Rubiáns y O Rial, acabando el recorrido en la bodega Coto de Xiabre. En Sanxenxo, la «ruta monumental» incluye un paseo por la historia y los valores arquitectónicos de viviendas solariegas e iglesias. A través de ellos podemos percibir el brillante reflejo de un pasado que, seguro, no siempre fue mejor.