Investigan si el monitor de Cesures distribuía las imágenes

Susana Luaña Louzao
susana luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Al trabajador se le acusa de un presunto delito de abusos sexuales

29 jun 2011 . Actualizado a las 11:33 h.

Agentes especializados en delitos informáticos están estudiando los archivos recogidos en el ordenador del monitor de Pontecesures detenido por grabar a chicas en los vestuarios para conocer el alcance del uso que supuestamente hacía de esas grabaciones. La Guardia Civil recuerda que la investigación no empezó por ningún delito de tipo informático, sino por la denuncia de un grupo de chicas que se presentaron acompañadas de sus padres en el cuartel de Valga para informar de que habían encontrado la cámara en los vestuarios. Pero no se cierra ninguna vía, por lo que ahora se investiga si el acusado -en caso de que se demuestra su culpabilidad- usaba las imágenes para uso propio o si las distribuía por la red.

La gravedad de los hechos sería muy distinta en uno u otro caso, porque de momento a I.F.L. se le acusa de un presunto delito de abusos sexuales, al que corresponde una pena que iría de uno a dos años de cárcel o una multa de 12 a 24 meses. En cambio, si se demostrase que distribuía las imágenes por la red, se le podría acusar incluso de un delito de pornografía infantil, con penas que van de uno a cuatro años de cárcel. De todos modos no existe, de momento, constancia alguna de que el detenido distribuyese el material, porque la denuncia de las alumnas se refiere solo a la grabación de las imágenes.

La detención causó una profunda conmoción tanto en Pontecesures como en Padrón, donde vive el monitor, sobre el que hasta la fecha no existía sospecha alguna. Es más, en el Club Náutico Pontecesures lo tenían por una persona muy trabajadora y un deportista vinculado toda su vida al piragüismo. Al parecer, a raíz de los hechos y de sus consecuencias, el monitor sufrió una crisis de ansiedad y tuvo que ser hospitalizado.

La denuncia de las chicas se interpuso el pasado viernes. Las muchachas acudieron al cuartel de la Guardia Civil de Valga acompañadas de sus padres y explicaron que habían encontrado en las duchas, camuflada entre unas herramientas, una cámara de vídeo. La denuncia acabó con la detención del monitor, que esa misma noche prestó declaración y al día siguiente quedó en libertad con cargos. El club lo apartó al momento de sus funciones.