Ahora, con la directiva muy mermada en número, todas las miradas se centran en la Xunta. Se pretende que desde la Consellería do Mar se fije cuanto antes una fecha en la que poder convocar nuevas elecciones al pósito. Desde el ente regional se quiere unificar ese calendario para toda Galicia, lo que deja a cofradías como la de A Illa en un estado de prórroga forzosa de mandato.
Ahí es donde se postula la figura de la junta gestora para seguir llevando las riendas de la asociación isleña, ya que técnicamente la actual situación es difícilmente sostenible.