Los afectados acusan al gobierno local de «inoperancia» ante unos problemas que, dicen, son de fácil solución
12 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.La asociación de vecinos O Souto, de Rubiáns (Vilagarcía), ha decidido sacar a la calle su malestar por el problema de inundaciones que sufre esta parroquia de modo que han lanzado un ultimátum: o llega una solución para la zona de Perrón en el plazo de quince días o serán los propios vecinos los que tomen cartas en el asunto. «Imos facer unha concentración en Perrón e iremos con picos e palas para, se o Concello non o fai, abrir nós mesmos a zanxa para meter a nova tubería. É unha solución terceiromundista pero tras ano e medio esperando e vendo que non se nos fai caso teremos que variar a nosa estratexia. Dóenos pero non nos deixan outra opción», explicó ayer el presidente de la asociación, Xurxo Abuín.
Perrón constituye un claro ejemplo de lo que en la asociación consideran un claro ejemplo de «inoperancia» por parte del Concello. La solución, afirman, pasa por cambiar la tubería que atraviesa la carretera y que canaliza el arrollo de Chuziños porque la actual resulta escasa y eso provoca que desborden las pluviales en cuanto llueve. La última vez fue el jueves «e tampouco choveu tanto», explica el vocal de la asociación Manolo González, que es uno de los vecinos directamente afectados por este problema. Su casa está al pie de la carretera y cuando quiere cruzar al otro lado para visitar a su hermano, por ejemplo, se ve obligado a dar un rodeo porque la gran charca que anega la vía le impide el paso.
La solución es, a juicio de la asociación, perfectamente asumible para el Concello. «Esa obra a fan os operarios municipais nunha mañá». Por eso consideran más grave, si cabe, la falta de respuesta municipal.
La de Perrón no es, ni mucho menos, la única inundación que trae de cabeza a los vecinos de Rubiáns. Lago, Abelle, Barbeitos y la carretera de Loenzo son otros de los puntos que se anegan frecuentemente como consecuencia de las obras públicas que afectan a la parroquia: las circunvalaciones norte y sur, el AVE o la construcción de una nueva pista por el monte.
La asociación lleva más de un año reclamando que se tomen medidas, vía entrevistas y escritos, pero las soluciones no llegan. Y algunas intervenciones que realizó el Concello con el fin de paliar el problema resultan, a juicio del colectivo, insuficientes y hasta inadecuadas. «Na zona do Lago chegaron a conectar a rede de pluviais co alcantarillado, que é unha barbaridade», indicó Abuín.
Desde O Souto lamentaron ayer que por parte del gobierno que dirige Dolores García solo le hayan dado «boas palabras» pero hechos concretos «ningún». «Nós conseguimos que un veciño cedera o terreno para poder levar as augas ata o río Leiro e só pedía que lle reconstruiran o seu muro. Foi unha xestión da asociación que podía dar unha solución ao problema, pero non se fixo nada».
En su batalla por conseguir erradicar las inundaciones en la parroquia, la asociación acudió hace un año al pleno de Vilagarcía con una pancarta, Ayer anunciaron que volverán a presentarse ante la corporación en Ravella en cuanto se celebre el próximo pleno.