Los vilagarcianos se gastarán 412,32 euros de media durante este período navideño

La Voz

AROUSA

29 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Los vilagarcianos ya saben qué presupuesto deben reservar para afrontar el gasto que siempre llevan aparejadas las fechas navideñas. La Fundación Luso-Galaica ha realizado un estudio sobre los hábitos de consumo de los ciudadanos arousanos y ha concluido que, de media, cada habitante invertirá 412,32 euros en la recta final del mes de diciembre y los primeros días de 2009.

Como suele ocurrir, el capítulo que más recursos exigirá será el de la alimentación y las compras en las grandes áreas. Engalanar las mesas para las fechas más señaladas de este período vacacional supondrá un desembolso de 103,14 euros por persona, siendo el capítulo de regalos para adultos y otros gastos, ligeramente inferior (99,38 euros). Los juguetes para los niños costarán este año 69,25 euros por persona.

Los otros dos grandes grupos que exigirán nuevos recursos económicos serán los de la lotería (el sorteo del Gordo se reserva 55,32 euros mientras que para la lotería del Niño habrá 23,05 euros). Finalmente entra en esta terna todo lo relacionado con la celebración de la Nochevieja, que ascenderá a 62,18 por vilagarciano.

En total, computando la población de la ciudad por encima de los 35.000 habitantes, la magnitud de gasto prevista rondará los catorce millones y medio de euros (14.453.052,96 euros).

Este dato, traducido a unidades familiares revela que en cada hogar de Vilagarcía se invertirán 1.315,30 euros.

Menos que el año pasado

A pesar de que los datos puedan parecer muy elevados, lo cierto es que comparativamente, son inferiores al del pasado ejercicio. De hecho el estudio realizado refleja que los bolsillos de los ciudadanos se están resintiendo del panorama económico general y sus estimaciones de gastos han menguado. La cifra media de este frenazo será de 16,85% con respecto al mismo período del pasado año.

Los dos capítulos que más restricciones encontrarán son el de los regalos para los adultos (alrededor de un 22%) y el de la alimentación, que a pesar de ser el más elevado de todos los que contempla la encuesta, se verá reducido en torno a un 19% si se compara con 2007.