La plantilla del pósito cambadés irá a la huelga el 3 de noviembre si González no abre una negociación laboral

La Voz

AROUSA

04 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Si nada lo remedia, los trabajadores de la cofradía de Cambados harán huelga el próximo día 3 de noviembre. En esa fecha ni funcionarán las oficinas, ni la lonja, ni la fábrica de hielo, y ni tan siquiera habrá vigilancia por mar o por tierra. Así lo anunciaron ayer los representantes del personal en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en la sede del sindicato Comisiones Obreras. La fecha está fijada y el órdago lanzado. «É a confraría e é o patrón maior o que pode impedir que esa situación se produza», explicaban Enrique Iglesias y Diana Dieste, portavoces de la plantilla. Para que la protesta no llegue a realizarse bastaría con que Benito González se aviniese a abrir una negociación laboral que hasta ahora, dicen los trabajadores, ha bloqueado sistemáticamente.

Ayer, los representantes de los trabajadores recordaron que llevan diez meses «intentando reunirse» con la dirección de la cofradía para intentar negociar las condiciones laborales de un heterogéneo y variado grupo de empleados. Sin embargo, no han recibido más que silencio por respuesta y excusas que no parecen haberlos convencido para nada: «Agora din que están en funcións. Pero antes non estaban en funcións e tampouco daquela fixeron nada». Tras enviar varios escritos a la Xunta, a Inspección de Traballo y al Concello de Cambados, han decidido poner fecha a una protesta que paralizará durante un día el puerto de esa localidad.

«A convocatoria basta con facela con cinco días de antelación», recordaba ayer Ramón Bueno, de Comisiones Obreras. «Nós facémola cun mes porque seguimos a lles dar tempo aos dirixentes da confraría», puntualizaba Diana Dieste, la delegada de personal del pósito.

Ella, al igual que su compañero Quique Iglesias, quiso dejar claro que «isto aínda ten solución». Si antes de la fecha prevista para el paro el patrón mayor establece con ellos un calendario de reuniones para abordar todas las cuestiones que preocupan a los trabajadores, están dispuestos a levantar la convocatoria.

Los socios

«Nós non queremos ir contra os mariñeiros», decían ayer los trabajadores del pósito. «Pero tamén temos que defender os nosos dereitos», concluían. Y aseguran que, tras casi un año intentando dialogar, no les queda más salida que adoptar medidas de presión. Por eso, piden a mariscadoras y marineros «comprensión».

El eje de sus reclamaciones es sencillo. El personal de la cofradía se rige por el convenio de oficinas. Pero hay muchos trabajadores que desempeñan funciones que nada tienen que ver con esa actividad. La intención de la plantilla es regular de forma real y efectiva la situación de esos trabajadores.

La propuesta de la plantilla de la cofradía cambadesa, aprobada por unanimidad de los trabajadores en el mes de enero, hace mención a asuntos como los horarios, las vacaciones y las remuneraciones. El paquete de medidas que los trabajadores han puesto sobre la mesa, sin embargo, no ha salido aún del cajón de los órganos directivos de la cofradía. «Parece incrible que alguén que sempre está apelando á democracia, como é Benito González, neste asunto evite cumplir co que marca a normativa», sentenciaba ayer Ramón Bueno.