HEMEROTECA Muere en El Cairo el último sha de Persia, Mohamed Reza Pahlevi

Carlos Fernández REDACCIÓN

AROUSA

SUCEDIÓ EN 1980

27 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

Después de ser uno de los jefes de Estado más poderosos del mundo, sobre todo por la producción y reservas de petróleo que tenía su país, el sha de Persia se convirtió, tras ser depuesto por la revolución jomeinista, en una especie de apestado que nadie quería tener como huésped. Al final, acabó en Egipto, falleciendo en El Cairo a finales de junio de 1980, en donde vivía con su familia. Significativamente, pocos jefes de Estado, sobre todo occidentales, y otros políticos asistieron a sus funerales, siendo el único de relieve el ex presidente norteamericano Richard Nixon. Reza Pahlevi había nacido en 1919 y comenzó a reinar en Persia en 1941. Tras sobrevivir, con la ayuda de las potencias occidentales, a un golpe dado por su primer ministro Mossadeq, inició lo que se denominó la revolución blanca, financiada por el dinero que proporcionaba el petróleo. Obtuvo algunos éxitos, pero no los suficientes para rescatar a su país de la miseria y del atraso. Destacaron, dentro de su megalomanía, los festejos imperiales celebrados en Persépolis, que costaron varios cientos de millones de dólares. Los clérigos chiíes y su líder Jomeini, exiliado desde 1971, con el apoyo mayoritario de las fuerzas armadas, provocaron su caída, en febrero de 1979. Bien pertrechado de dólares, deambuló por varios países hasta su muerte en Egipto. Su esposa Farah Diba escribió posteriormente un libro de memorias