Joaquín del Valle-Inclán descubrió en Pobra la escultura de bronce que honra al literato
AROUSA
El nieto del escritor dejó de lado su hábito de evitar los actos públicos para asistir a la inauguración de la talla La obra preside la plaza en la que está ubicada la casa museo del dramaturgo
07 sep 2002 . Actualizado a las 07:00 h.El Concello de Pobra rindió el viernes un efusivo homenaje a Ramón María del Valle-Inclán. A las nueve de la noche, cientos de vecinos se concentraron en la plaza del Cantón da Leña para no perderse la inauguración de una estatua que, de ahora en adelante, presidirá un lugar simbólico para el escritor: la torre de Bermúdez, contrucción renacentista que antaño fuera propiedad de su familia y que hoy da cabida a su casa museo. El acto contó con un invitado de excepción: el nieto del dramaturgo Joaquín del Valle-Inclán, quien acudió en representación de su padre Diego, el marqués de Bradomín. Los descendientes del autor, incluido Joaquín, no son proclives a acudir a los homenajes públicos, por lo que el alcalde, Isaac Maceiras Rivas, le agradeció efusivamente el que quisiera sumarse a los pobrenses en el tributo que éstos ofrecieron a su abuelo. Antonio González Millán, concejal de Cultura, recordó que este año se cumple el centenario de un hito en la vida de Valle-Inclán: la publicación de Sonata de Otoño , pieza magistral del modernismo que recoge por primera vez el topónimo que el autor utilizó para referirse a la villa: Viana del Prior. Isaac Maceiras, por su parte, quiso agradecer al ex alcalde Segundo Durán Casáis, el que comprase hace veinte años la torre de Bermúdez para restaurarla y añadirla al patrimonio municipal. El regidor había contado con la colaboración de Xunta y de la Diputación de A Coruña, que por aquel entonces estaban presididas por Gerardo Fernández Albor y José Manuel Romay Beccaría. Ambos estuvieron presentes en la inauguración de la escultura. Un gran parecido Terminados los discursos, Joaquín del Valle-Inclán procedió a retirar el manto que cubría la estatua de su abuelo. Ante los ojos de los presentes apareció entonces una escultura en bronce de dos metros y medio de alto y 230 kilos de peso cuyo parecido con el dramaturgo fue muy celebrado por todos. Incluso el propio nieto quedó sorprendido de la similitud. La obra fue esculpida por el artista Gonzalo Sánchez Mendizábal. Para su elaboración, este escultor boliviano se inspiró en el poema de Rubén Darío Soneto iconográfico , cuyos versos aparecen al pie de la estatua. También están grabados en el pedestal tres pasajes surgidos de la pluma de Valle-Inclán, uno de los cuales está dedicado a la propia torre de Bermúdez: «Quiero hacer una casa estoica murada en piedra de Barbanza: la casa de Séneca, heroica de templanza».